La extrema derecha, la primera opción de los jóvenes franceses
El partido de Le Pen tiene un 29% de intención de voto, frente al 20% de Macron
La extrema derecha de Jean-Marie Le Pen comenzó a convertirse en el primer partido obrero de Francia hace más de veinte años. La extrema derecha de Marine Le Pen comienza hoy a convertirse en el primer partido de los jóvenes franceses. Resumiendo varios estudios sociológicos, el vespertino ‘Le Monde’ (independiente de izquierda moderada), presenta ese proceso histórico con este titular a doble página: «Agrupación Nacional, primer partido de los franceses de 25 a 34 años».
El proceso histórico de la conversión del Frente Nacional (FN, extrema derecha) de Jean-Marie Le Pen en el primer partido obrero de Francia es bien conocido: comenzó con el hundimiento del proyecto político de la «unión de la izquierda» (entre 1981 y 1983) y empezó a convertirse en una realidad política, electoral, con el fin de la segunda presidencia de Mitterrand, en 1995. Desde entonces, el antiguo FN y su sucesor, Agrupación Nacional (AN), han conseguido entre el 30 y el 35 % de los votos en todas las elecciones que se han sucedido durante los últimos 20 años.
Cuando Marine Le Pen decidió cambiar el nombre del partido fundado por su padre, FN, sustituido por AN, el mismo proceso histórico siguió confirmándose, para ‘acelerarse’ durante el mandato presidencial de Emmanuel Macron,
desde el mes de mayo de 2017.
En la primera vuelta de la elección presidencial de 2017, los jóvenes de 18 a 24 años dudaban entre la extrema izquierda de Jean-Luc Mélenchon (29 % de los votos), la extrema derecha de Marine Le Pen (21, 3%) y Emmanuel Macron (18% de los votos). Cuatro años de presidencia ‘macroniana’ han cambiado profundamente la sensibilidad de los franceses más jóvenes, de 18 a 24 años: Mélenchon solo tiene un 19% de intención de voto, Marine tiene un 23%, y Macron se hunde entre los más jóvenes, con un 15% de intención de voto.
Caída de Macron
Entre los franceses de 25 a 34 años, la tendencia es igualmente significativa. Hace cuatro años, un 29% votaron por Macron en la segunda vuelta presidencial; y solo un 20% lo hicieron por Marine Le Pen. Hoy, la tendencia es radicalmente inversa: solo un 20% votaría por Macron, mientras que un 29% lo haría por la presidenta del partido de extrema derecha.
Predecir Dabi, director general adjunto del IFOP (Institut français d’opinion publique, primer instituto de estudios de opinión, en Francia), estima que estamos asistiendo a un «proceso histórico»: «Lo que me parece más sorprendente es que los jóvenes han abandonado a su incierta suerte a los partidos tradicionales de izquierda y derecha, el PS, o Los Republicanos, el partido de Sarkozy. Los jóvenes buscan otra cosa. En el año 2017, la extrema izquierda de Mélenchon y las promesas reformistas de Macron sedujeron más que los ecologistas. Ahora estamos asistiendo a una fuerte progresión de la extrema derecha, que es el primer partido de los hombres de 25 a 34 años, una gran novedad».