La Fiscalía: «Ausbanc y Manos Limpias generaban miedo para ganar dinero»
Pide 116 años para Pineda y defiende la legalidad de la causa al margen de Villarejo La acusación
El fiscal de la Audiencia Nacional José Perals enunció ayer sus conclusiones tras un año largo de juicio al presidente de Ausbanc, Luis Pineda; su homólogo en Manos Limpias, Miguel Bernad, y ocho colaboradores y pidió que sean condenados por «aprovecharse» del derecho de asociación, de la libertad de expresión y de la figura de la acusación popular para extorsionar durante años con afán de lucro. El modus operandi, conforme resumió, fue siempre el mismo: «Dar miedo. Miedo que generaban para que la gente pagara dinero».
Y ese miedo tenía distintas formas, tal y como detalló a lo largo de cuatro horas de exposición. Por un lado, la extorsión a cajas, bancos y empresas so pena de publicar informaciones negativas. Por otro, la que se ejecutaba previa presentación de denuncias, querellas o impulsos procesales por la vía de la personación en procedimientos en marcha. El más conocido, el caso Noós, donde Manos Limpias sustentó los cargos contra Doña Cristina de Borbón que le acarrearon, en palabras del fiscal, «varios meses de banquillo» sin estar «justificado». Es sólo uno de la veintena de casos por los que están acusados Pineda y Bernad, así como la abogada de Manos Limpias en Noós, Virginia López Negrete, por delitos que van desde la organización criminal al
Luis Pineda
La Fiscalía pide 116 años de prisión por 16 delitos continuados de extorsión, tres delitos más de extorsión y ocho delitos de extorsión en grado de tentativa. Añade delitos de estafa, fiscales y de blanqueo de capitales e insta una multa de más de 10,3 millones de euros.
Miguel Bernad
El Ministerio Público reclama para el presidente de Manos Limpias cerca de 25 años de cárcel por los delitos de organización criminal, extorsión y extorsión en grado de tentativa.
Virginia López Negrete
El fiscal interesa una pena de doce años de prisión para la abogada por delitos de organización criminal como integrante, dos delitos continuados de extorsión y un delito en grado de tentativa. blanqueo pasando por diversas extorsiones que en el caso de Doña Cristina, lo fueron en tentativa, pues no cobraron los tres millones que, según la instrucción, pedían para retirar la acusación. Otros sí pagaron, generalmente, en forma de acuerdos de publicidad, conforme relató Perals. «Son hechos muy graves, cometidos a lo largo del tiempo, que han afectado a gran número de personas, que han alterado el normal funcionamiento del mercado libre y las instituciones», apuntó.
Pero antes de pronunciarse sobre cada uno de esos hechos por los que Pineda afronta 116 años de cárcel y Bernad, cerca de 25; la Sala deberá dirimir la nulidad de la causa que ha instado el primero porque entiende que obedece a una maniobra del comisario Villarejo por encargo del BBVA. Este asunto se investiga en la Audiencia Nacional y Pineda consta como víctima y perjudicado. «Se ha alegado que ha sido todo un montaje policial seguido por todas las entidades de carácter público que han intervenido en este procedimiento y que todo derivaba de una denuncia falsa que en realidad no es falsa, sino anónima», apuntó el fiscal. Incidió en que fue la Fiscalía quien tras nueve meses de investigación presentó la querella, de modo que «no se dio pábulo, sin más», a aquella denuncia inicial. Además, defendió el trabajo de los investigadores, pues no hay indicio de irregularidad ni de causa prospectiva y todos negaron «tajantemente» haber sufrido presiones. «Toda la denuncia inicial y todas las diligencias practicadas se producen de acuerdo a la legalidad y la jurisprudencia Supremo», zanjó.