El Prado ve fundadas razones para atribuirlo a Caravaggio
La Comunidad de Madrid publicó ayer en su Boletín Oficial (BOCM) la resolución de 9 de abril de 2021, de la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Comunidad de Madrid, por la que se incoa el expediente de declaración de Bien de Interés Cultural del supuesto Caravaggio, que iba a ser subastado en la sala Ansorena de Madrid con un precio de salida de 1.500 euros, un día antes, el día 8 de abril, como obra del Círculo de José de Ribera, bajo el título ‘La coronación de espinas’, y que los expertos han atribuido como un ‘Ecce Homo’ perdido de Caravaggio. Aunque aún no es BIC (el proceso puede tardar hasta nueve meses), sí cuenta con la protección de un BIC. A instancias de la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, conforme a una Orden Ministerial de 7 de abril de 2021, la obra fue declarada inexportable, como medida cautelar.
Según el informe técnico emitido por el Museo del Prado (realizado por David García Cueto, jefe del Departamento de Pintura Italiana y Francesa del museo), «la procedencia de esta pintura podría estar relacionada con el coleccionismo de los virreyes de Nápoles del siglo XVII. De este modo, existen fundadas razones formales y documentales para considerar que es probablemente obra original de Caravaggio (1571-1610), que estuvo en el siglo XVII en la colección del secre
tario de la corte de Nápoles don Juan de Lezcano, la cual pasó sucesivamente a la del virrey conde de Castrillo, con la que habría llegado a Madrid».
En el informe del Prado, también se advierten «claros paralelismos de cronología y lenguaje pictórico entre la pintura y la ejecución estilística de obras certificadas como originales de Caravaggio. Se constatan algunas analogías formales un tanto aclaratorias pese al relativo deterioro de la pintura. Dichas analogías se advierten, por ejemplo, entre la figura del Cristo protagonista del ‘Ecce Homo’ y el ‘David’ de la Galleria
Borghese de Roma. Pese a la diferencia de edad de los personajes, la construcción anatómica de torso y cuello, la leve inclinación de la cabeza, la direccionalidad baja de la mirada y las sombras sobre la mitad izquierda del rostro ponen de manifiesto una génesis debida al mismo autor. La figura de Pilatos en primer término presenta de igual modo importantes paralelismos con otras obras del autor en cuanto a los modelos empleados y el modo de describir su anatomía, como ocurre en la confrontación con el fraile de la ‘Madonna del Rosario’ del Kunsthistorisches Museum de Viena».