La voz pausada de una actriz en plena madurez
Helen McCrory (1968-2021) El cine británico pierde a una gran actriz, fallecida en el mejor momento de su carrera
Helen McCrory tenía una de esas medias sonrisas que las actrices británicas parecen tener implantadas de natural. Un gesto que hacía que sus personajes pudieran intimidar al mismo tiempo que mostrar compasión, o viceversa. Pero era su voz, suave y grave al mismo tiempo, lo que daba un toque distinguido a ese acento tan marcado con el que componía sus papeles. Una voz que el viernes se apagó a los 52 años tras una lucha infructuosa contra el cáncer.
Su marido, el también actor Damian Lewis, lamentó su muerte en un emotivo comunicado: «Con el corazón roto anuncio que después de una heroica lucha contra el cáncer, la bella y poderosa mujer que es Helen McCrory ha fallecido en paz en su casa, rodeada de una ola de amor de sus amigos y familiares», dijo Lewis. «Murió como vivió, sin miedo. Dios, la amamos y sabemos lo afortunados que fuimos de haberla tenido en nuestras vidas», se despidió su marido.
Uno de los papeles en los que mejor demostró todos esos matices que su rostro maduro era capaz de componer fue el de la tía Polly en ‘Peaky Blinders’, su último gran éxito. Pero aunque Helen McCrory gozó de la popularidad global gracias a la serie de mafiosos de la BBC (emitida en España por Netflix), su filmografía cuenta con más de setenta títulos, y su nombre ha brillado en los créditos de películas como ‘James Bond: Skyfall’, la versión de ‘Hugo’ de Martin Scorsese o la muy británica ‘The Queen’.
También tuvo un papel recurrente en el mayor éxito nacido en Reino Unido en las últimas décadas, ‘Harry Potter’, donde interpreta a la bruja Narcissa Malfoy, madre de Draco. Y es que las grandes producciones de su país siempre tenían en cuenta, aunque fuera en roles secundarios, a una actriz que debutó en la pequeña pantalla en 1993, con breves apariciones en dos capítulos de las series inéditas en España ‘Performance’ y ‘Full Stretch’. Pero pronto saltó al cine, primero con un papel en la adaptación de la novela de Arturo Pérez Reverte ‘La tabla de Flandes’ y después hasta Hollywood, con ‘Entrevista con el vampiro’, donde coincidió con Tom Cruise, Brad Pitt y Antonio Banderas.
Con la temprana muerte de Helen McCrory se va una actriz que no había alcanzado su techo, a la que le quedaban por explorar nuevos caminos en sus registros, todavía con el horizonte de componer un gran personaje protagonista con el que demostrar que podía soportar sobre sus hombros el peso de todo el guion. El cine británico pierde a una gran actriz que se ha ido en el momento más dulce de su carrera.