El Getafe se flagela y el Eibar cree en el milagro
Un gol de penalti de Recio tras una mano inocente de Maksimovic en los estertores del partido dio la victoria al Eibar para soñar en el milagro de una permanencia que el Getafe se ha complicado sobremanera con este tropiezo grave en el Coliseum. La clasificación se aprieta por abajo y un punto puede decidir el descenso o la salvación en quince días de infarto.
Lo cierto es que Bordalás echó a su equipo atrás en la segunda parte y cometió el error de dar por bueno un empate que al final no se produjo, pues el riesgo era consabido y llegó en forma de pena máxima. Ya se sabe que quien juega al empate suele perder y el técnico azulón lo vivió en sus carnes para flagelar a su equipo en un sufrimiento que perdurará hasta la jornada 38.
Dos triunfos consecutivos
La felicidad del Eibar de Mendilíbar era contagiosa. Desahuciado al descenso hace tres semanas, hoy se encuentra a dos puntos de los puestos de salvación, que marca el Valladolid con 31 puntos.
El Getafe se metió en un lío increíble. El Eibar, que sumaba seis meses sin ganar fuera de Ipurúa, logró su segunda victoria consecutiva y vislumbra el milagro como posible. Su afición estaba resignada hace un mes y ahora cree que lo pueden conseguir si ganan sus partidos.
Con mucho en juego sobre el césped del Coliseum, ambos equipos salieron a no fallar. El error iba a ser penalizado de gravedad en un choque en el que se preveían pocas ocasiones. Y así sucedió. Un temporal de lluvia ayudó a la dureza y el antifútbol dominante. Patadas, golpes. El cansancio permitió al fin ocasiones en ambas porterías. Y esa mano en el área local en el minuto 87 decantó el triunfo y castigó al esquema defensivo azulón.