La Fontana de Trevi ya tiene quien la visite de nuevo
Italia elimina la cuarentena para los viajeros europeos y se abre al turismo
«Es una maravilla pasear por Roma. Todo está abierto y como hay pocos turistas, todo son facilidades; nos ha extrañado ver poca gente en el Vaticano y sus Museos». Sara y Rima son dos jóvenes sirias residentes en Alemania que han comenzado unos días de vacaciones en Roma. Nos cuentan sus jornadas en la ciudad como si fuera una aventura o un sueño realizado, después de la pesadilla de la pandemia, mientras se hacen fotos sin parar ante la Fontana de Trevi. Al igual que Sara y Rima, a Roma comienzan a llegar turistas. Se ven incluso grupos, algunos de personas mayores que ya han sido vacunadas, y se empiezan a formar pequeñas colas para visitar algunos de sus monumentos más simbólicos, como puedan ser el Coliseo, el Panteón o la Fontana de Trevi.
Solo con PCR
Este domingo marca el inicio de una nueva etapa. El viernes lo hizo Grecia y hoy es Italia. Los europeos pueden viajar sin la obligación de realizar cuarentena, aunque sí es obligatorio que vengan provistos del test negativo del Covid. Prácticamente todas las regiones italianas están clasificadas con el amarillo –color que indica riesgo moderado-, solo Valle d’Aosta está en naranja –riesgo medio alto- y no hay ninguna zona roja en las 20 regiones italianas.
La orden de relanzar el turismo interior y extranjero la dio el miércoles el primer ministro, Mario Draghi, al explicar sus planes en una sesión de control del Gobierno en el Congreso de los diputados: «Italia se reabrirá al mundo en condiciones de mayor seguridad. El salvoconducto o pase verde nacional (facilitará los viajes y movilidad entre regiones) estará vigente a partir de la segunda quincena de mayo», un mes antes que el salvoconducto europeo. «Pronto comenzaremos de nuevo, se volverá a todos los trabajos, a las fábricas, a lugares de reunión y esto es algo grandioso y hermoso. Hoy podemos decir que se reabre porque hemos tenido cuidado, aunque todavía debemos ser prudentes, para no dar marcha atrás», ha dicho el ministro de Sanidad, Roberto Spernza.
Por fin se ve luz al final del túnel. El optimismo que está imprimiendo Mario Draghi y su Gobierno de unidad nacional, formado por todos los partidos salvo Fratelli d’Italia, está dando esperanza a la gente. Aunque todavía los datos sobre la actividad turística son pobres. Un grupo de taxistas, que conversan en la parada fijada al lado del Panteón, nos asegura que su actividad
Crisis Hay colas frente al Panteón y el Coliseo pero la afluencia es un 80% más baja que antes del Covid
es un 80 % más baja que en los tiempos previos a la pandemia. «Al aeropuerto Fiumicino de Roma se acercaban cada día entre 1.500 y 1.800 taxis, hoy lo hacen poco más de 100», señala Luca, mientras un compañero nos ofrece la llave de su coche en clara señal de que, si pudiera, vendería de inmediato la licencia de su taxi. No extraña el dato si se observan los escasos vuelos que tienen programados las grandes compañías, porque todavía se viaja muy poco.
El ejemplo de Madrid
Los hoteles del centro histórico de Roma abren también sus puertas, mientras los restaurantes empiezan a ver llenas sus terrazas en días festivos, aunque la clientela es escasa entre semana -no es posible aún el servicio en el interior-. «Mi alquiler era de 10.000 euros mensuales por el local del restaurante; el propietario me lo rebajó a 4.000 por la pandemia, si no yo hubiera cerrado: ahora ya me llama para ver cuándo volvemos a subir el alquiler, pero no gano ni para gastos», nos dice Salvatore, el gestor del restaurante Rotonda, cerca del Panteón, al tiempo que comenta con elogios cómo el sector de la restauración ha sobrevivido en Madrid.
El toque de queda se mantiene a las 22:00, aunque el lunes el Gobierno decidirá seguramente posponerlo hasta las 23:00.