ABC (Sevilla)

Don Juan Carlos visitó a la Infanta para compensar su ausencia el día 5

El Rey padre viajó a Ginebra después de que Doña Cristina fuera excluida del almuerzo con el que celebró su 80 cumpleaños en La Zarzuela

- ALMUDENA MARTÍNEZ FORNÉS MADRID

Dos comidas Al no poder reunir a toda su familia, Don Juan Carlos optó por organizar dos almuerzos

Don Juan Carlos no pudo reunir a toda su familia en La Zarzuela el día de su 80 cumpleaños, como consecuenc­ia del alejamient­o institucio­nal impuesto por el Rey a su hermana, la Infanta Doña Cristina, y a su cuñado, Iñaki Urdangarin, tras el caso Nóos. Por ello, el Rey padre buscó una fórmula que le permitiera reunirse con todos los miembros de su familia en estas fechas, sin perjudicar a Don Felipe y sin excluir a Doña Cristina. Y esa fórmula consistió en organizar dos celebracio­nes.

Primero celebró su cumpleaños con un almuerzo en La Zarzuela, al que acudieron los Reyes y 70 miembros de su extensa familia, y el pasado lunes, coincidien­do con el 50 cumpleaños de Urdangarin, se desplazó a Ginebra para reunirse con su hija, su yerno y sus nietos. Don Juan Carlos viajó acompañado por Doña Sofía, Doña Elena y los hijos de esta, Felipe y Victoria. Todos ellos almorzaron juntos en un restaurant­e de la ciudad y a la comida se sumaron otros invitados.

Esta ha sido la primera vez que se ha sabido en tiempo real que Don Juan Carlos ha visitado a Doña Cristina desde que la Infanta se trasladó a vivir a Suiza, en julio de 2013. Sin embargo, según fuentes cercanas a la familia, también se desplazó el pasado otoño para acompañar a su nieto Juan Urdangarin, que cumplía 18 años. Además, es probable que el Rey padre se haya reunido en privado con su hija en ocasiones anteriores sin que haya trascendid­o.

Durante su reinado, Don Juan Carlos trató de mantener cierto alejamient­o institucio­nal con su yerno y su hija, y tras, el relevo en la Corona, lo mantuvo mientras duró el juicio oral. Aún así, trató de convencer a Doña Cristina para que renunciara al título de Duquesa de Palma de Mallorca y evitara a Don Felipe la dolorosa decisión de revocársel­o, algo que no logró. Don Juan Carlos también se mostró muy aliviado cuando la Justicia absolvió a su hija, y así se lo hizo saber.

Ahora que ya no es Monarca pero sigue siendo padre, Don Juan Carlos ha querido acompañar a su hija y a su yerno en unos momentos difíciles, cuando faltan meses para que el Su- premo dicte la sentencia definitiva del caso Nóos, que podría implicar el ingreso de Urdangarin en prisión. Doña Sofía, sin embargo, nunca dejó de visitar a su hija como consecuenc­ia del caso Nóos, y siempre dejó claro que su condición de Reina consorte no interferir­ía en su papel de madre.

Con la visita del lunes a Ginebra, los Reyes padres compensaro­n a su hija de la exclusión del cumpleaños de Don Juan Carlos, el pasado día 5, cuando además se difundió una foto de familia que no agradó a Doña Cristina. Pero Don Felipe no tenía otra opción en estos delicados momentos, en los que no se puede permitir fisuras que resten autoridad moral a Corona.

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ABC Doña Sofía y Doña Cristina, en una imagen de archivo

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