«La enfermedad renal aumenta la letalidad en los contagiados»
Sólo doce pueblos están libres de Covid desde que se inició la pandemia Premio de la Fundación AstraZeneca, reivindica la creación en España de una carrera de investigación
Sólo doce de los 778 municipios de Andalucía se han mantenido libres de Covid desde el inicio de la pandemia. Se trata de localidades poco pobladas y ubicadas en serranías, relativamente aisladas en cuatro provincias.
La mayoría de estos pueblos sin Covid, siete, se encuentran en la provincia de Almería, y de estos la mayor parte están ubicados en la Sierra de Filabres. Allí no han registrado contagios los municipios de Alcudia de Monteagud, con 152 habitantes y la contigua Benitagla, que con 58 habitantes es la localidad más despoblada de Almería. También en los Filabres siguen sin casos Covid la localidad de Laroya, con 192 habitantes; Suflí, 204 y Velefique, 242. Ya en la Alpujarra almeriense aparece sin contagios Paterna del Río, la localidad sin Covid con más población de Andalucía, cuyos 371 habitantes han resistido sin contagios las tres oleadas del virus.
En Granada tres localidades no saben lo que es tener vecinos contagiados por el coronavirus. Localizados todos en la Alpujarra Almeriense son Carataumas, con 194 habitantes; Cástaras, 294 y la colindante Lobras en la que viven 145 vecinos.
El municipio menos poblado de Andalucía, Cumbres de Enmedio en la onubense Sierra de Aracena y Picos de Aroche también se ha librado hasta ahora del Covid
En Málaga, no hay Covid en Atajate, que resiste frente a la epidemia, lo que no pudo hacer en 1877 con otra plaga, en aquel caso la filoxera que arrasó sus vides, generando la ruina y el despoblamiento del municipio que hoy cuenta con 168 habitantes.
Pueblos cerrados
Por otra parte, los comités territoriales de alerta señalaron ayer los municipios que por superar los 500 casos por 100.000 habitantes en 14 días quedarán cerrados a la movilidad a partir de la madrugada del martes al miércoles o bien entran en nivel de alerta 4 grado 2 al superar la tasa de mil casos, que además tendrán que cerrar toda la actividad no esencial. En esta última lista hay ya 235 localidades, entre ellas Almería capital, o Baza en Granada; Chipiona, Jerez de la Frontera o Rota, en la provincia de Cádiz. En Huelva, Aracena, Ayamonte, Isla Cristina, la Palma del Condado o Punta Umbría. En Málaga, cuya capital podría entrar el sábado en esta situación, ya están cerradas Marbella o Estepona.
La científica jiennense María Dolores Sánchez Niño, licenciada en Biología por Universidad de Jaén y doctora en Biomedicina por la Universidad Autónoma de Madrid, ha resultado ganadora de los V Premios de Jóvenes Investigadores de la Fundación AstraZeneca por su investigación para inhibir una proteína que allana el terreno al coronavirus en los enfermos renales.
–¿Qué aporta el proyecto ganador a la investigación sobre el coronavirus?
–Investigamos para determinar la razón por la que la enfermedad renal es el factor de riesgo más frecuente para Covid-19 letal. Es la patología que más aumenta la probabilidad de muerte a causa de la pandemia. No tenemos claro por qué mueren más enfermos renales que los que padecen otras patologías, pero hemos descubierto la influencia de la proteína NIK en las proteínas que facilitan la entrada del virus en las células. Con el proyecto pretendemos dificultar la entrada del virus en las células mediante inhibidores de NIK
–¿De qué manera?
–El virus Sars-CoV2 utiliza diversas proteínas de la membrana de la célula como puerta de entrada y una vez dentro secuestra la maquinaria celular para reproducirse y multiplicarse. Estamos estudiando cómo disminuir el número de puertas de entrada del virus dentro de la célula. Para ello hemos diseñado fármacos que inhiben NIK.
–¿Del éxito de su investigación se deriva el premio?.
–El premio supone un espaldarazo a la obra de muchos años de trabajo muy duro en el ámbito de la investigación renal. La financiación para la ciencia en España es muy difícil: hay poco dinero y muchos investigadores. Por eso es magnífico recibir una ayuda de 20.000 euros para financiarnos un año.
–¿En que invertirá el dinero?
–En desentrañar la parte inicial del proyecto. En ciencia una cosa te lleva a otra, de manera que podemos sentar las bases para otros proyectos. Por ahora, hemos diseñado una serie de fármacos en colaboración con un grupo de químicos de la Universidad de Alcalá de Henares. Estamos en fase experimental. Primero probaremos su eficacia in vitro con células renales y en segundo lugar con ratones.
–¿Le sorprende la rapidez con que en otros países se han fabricado vacunas para combatir el coronavirus?
–En absoluto. Lo que explica que las vacunas hayan salido de donde han salido y tan rápidamente es que los gobiernos y la iniciativa privada han puesto encima de la mesa todo el dinero y todos los recursos que han necesitado los científicos.
–¿En España no es así?
–En España hay mucho talento investigador, pero no hay tantos recursos como en otros países europeos o Estados Unidos. Estos países tienen más recursos públicos y además grandes empresas farmacéuticas y un vibrante sector de empresas biotecnológicas de las que carecemos en España. Aquí hace falta un plan nacional que incluya una carrera científica de investigación. Los científicos académicos con suerte y trabajo podemos enlazar contratos de investigación y proyectos con un horizonte temporal máximo de tres años. Solamente tenemos financiación para los experimentos del día a día durante períodos limitados de tiempo.
«Hemos diseñado fármacos en fase experimental con la Universidad de Alcalá de Henares»