Padre e hijo, a tiros contra un vecino de Osuna por una deuda de drogas
La marihuana como fuente de conflicto. Así podría resumirse el problema que está sufriendo Osuna y que está provocando un empeoramiento de la seguridad ciudadana. El último episodio se vivió el pasado 15 de enero, cuando un padre y un hijo se liaron a tiros contra un vecino por una deuda derivada de este negocio ilícito que está proliferando no sólo en este pueblo de la campiña sevillana. Sirvan de ejemplos las numerosas incautaciones de cultivos, la mayoría situados en el interior de inmuebles, que realizan los cuerpos policiales por toda la provincia. Desde la Policía Local de Osuna confirman que desde este pasado verano ya se han sucedido tres tiroteos con el mismo trasfondo.
Según informó ayer la Guardia Civil, tres personas fueron detenidas por ese último enfrentamiento armado: los dos atacantes y la supuesta víctima, la cual se defendió usando también un arma de fuego. «El tiroteo generó un aluvión de llamadas de emergencia. Inmediatamente Policía Local y todos los efectivos de la Guardia Civil de la comarca se desplazaron al lugar describiendo una escena de enorme magnitud en la que pudieron hallarse hasta 17 impactos de arma de fuego, la mayoría de ellos contra la vivienda de una familia».
Al menos 17 disparos
R.S.C, de 39 años, y su hijo R.S.R., de 19, abordaron a la víctima, I.V.B., de 26, en la calle para reclamarle una deuda. Éste escapó y se refugió en su casa, situada en un callejón sin salida (calle Quemada) del centro de la localidad. Hasta allí le persiguieron padre e hijo que no dudaron en disparar en reiteradas ocasiones contra la fachada y el coche de la víctima.
Cuando los agentes llegaron al lugar, el tiroteo había terminado y ya no estaban los atacantes. Sin embargo, los agentes de la Guardia Civil supieron quienes eran. Días después y tras obtener autorización judicial accedieron a las viviendas de los sospechosos y de la víctima donde encontraron las armas que se habían usado en el tiroteo. En la vivienda de R. S. C. descubrieron una plantación de marihuana; además de fuertes medidas de seguridad y hasta media docena de perros de razas potencialmente peligrosas. En la casa de la víctima detectaron elementos de que también se había cultivado droga.
El juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 1 de Osuna ordenó el ingreso en prisión de R.S.C., después de que éste asumiera toda la responsabilidad del tiroteo para librar de la cárcel a su hijo.