La repetición del juicio del crimen de las cuñadas será en marzo
El TSJA anuló la sentencia que condenó a 23 años de cárcel a los tres acusados
Ya hay fecha para el segundo juicio con jurado por el «crimen de las cuñadas» en la Audiencia de Sevilla. Carmen y Rosa N.S. y Francisco Javier M.R., acusados del asesinato de Anabel D.V. en abril de 2016 en La Rinconada, tendrán que volver a sentarse en el banquillo a partir del 19 de marzo después de que el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía declarase nulo el juicio celebrado en febrero de 2020 en la Audiencia y, por ende, también el veredicto y la sentencia que condenó a los tres a 23 años de cárcel por matar a la que fuera viuda del hermano de las investigadas, con la que mantenían desavenencias por la educación y custodia de la niña que la víctima tuvo con su marido, por la muerte de éste y por la condición de paya de Anabel.
En septiembre de 2020 se conoció la decisión del TSJA que suponía un vuelco para un caso ya juzgado y sentenciado. Los tres acusados, que cumplían pena en prisión, fueron rápidamente puestos en libertad porque volvían a su condición de investigados.
El 19 de marzo, día de San José, precisamente patrón de La Rinconada, dará comienzo la vista oral en la Audiencia, que contará con nuevos miembros del jurado popular y una nueva magistada-presidenta, Purificación Hernández, según han informado a ABC fuentes del caso.
El jurado popular consideró probado y así se recogía en la sentencia dictada entonces por la magistrada Esperanza Jiménez que Rosa, Carmen y Francisco Javier, sobre las 9.45 horas del 19 de abril de 2016, se presentaron en el domicilio de la fallecida en La Rinconada, abriéndoles la propia Anabel «pese a las pésimas relaciones que la misma tenía con tales cuñadas, cuyo comportamiento (como el de otros miembros de la familia) la hacían sentirse controlada», ya que «no compartían la forma de llevar el luto por el hermano fallecido o por el modo de educar a la sobrina» de las acusadas.
Los tres, «armados con un objeto romo y de peso y de un cuchillo de cocina, se abalanzaron» sobre la víctima, que intentó primero frenar con sus brazos los golpes. En el suelo «continuaron golpeándola y apuñalándola reiteradamente, causándole un desmesurado sufrimiento», hasta que le provocaron finalmente la muerte. Los condenados abandonaron la vivienda en un vehículo tras dar muerte a la cuñada, que tenía tres hijos menores.
Durante el juicio con jurado hasta tres testigos protegidos aseguraron que oyeron gritos de socorro que salían de la casa de Anabel, gritos que alertaba de que la estaban matando. Minutos después vieron salir a las dos acusadas y al varón e irse en un coche blanco. Precisamente, la declaración de estos testigos y cómo lo hicieron en el juicio lo que motivó el recurso de las defensas ante el TSJA alegando vulneración de las garantías procesales, y en particular del derecho de defensa, como consecuencia de la decisión de la magistrada de no desvelar a los abogados la identidad y domicilio de las testigos protegidos.
Consideraron las defensas que la magistrada no ponderó debidamente las razones de protección con las exigencias del derecho de defensa, dada la relevancia de dichos testigos como prueba sin la que la condena habría quedado huérfana de todo apoyo.
Ninguno de los acusados admitió en el juicio haber estado presente en el lugar y momento de los hechos. Pero el jurado determinó que los tres fueron vistos salir de la vivienda de la víctima en la mañana en que fue agredida hasta la muerte, y por ello fueron condenados. Para el TSJA, es «rotundamente claro» que la única prueba que fundamentó la condena por los delitos de asesinato fueron las declaraciones de dos testigos protegidos.
En la sentencia del TSJA, elaborada por el magistrado Miguel Pasquau, ponente también del caso del triple crimen de Dos Hermanas, se indica que la decisión de la magistrada de mantener el anónimato de los testigos tuvo una motivación insuficiente: «requiere algo más que una alusión al temor de eventuales represalias».
A partir del día 19 de marzo, y presumiblemente hasta el día 26, se volverá a vivir un nuevo episodio judicial del «crimen de las cuñadas» en la Audiencia de Sevilla.
Hasta tres dijeron en el juicio que los acusados salieron de la casa de la víctima el día de los hechos