ABC (Sevilla)

La Calle del Infierno, parque de atraccione­s durante primavera

Los feriantes plantean un recinto cerrado y vigilado y no tener que perder un segundo año

- E. BARBA

Además, como es lógico, estas casetas serían objeto de un estricto control de entradas, con toma de temperatur­a de los usuarios y aforos limitados conforme a las cifras que en ese momento estén en vigor. Dentro, además, se podría consumir en mesas con distancia de separación suficiente, al modo de los habituales veladores de los bares y restaurant­es. Los caseteros también ha puesto sobre la mesa una iniciativa similar en estos terrenos de la dársena, aunque su planteamie­nto inicial con casetas al uso ya ha sido rechazado por no ser viable en las actuales condicione­s sanitarias. Para recibir el permiso, este recinto debe contar con «casetas sin techo», como los tradiciona­les cines de verano para distribuir los veladores y poder separarlos.

Este sustitutiv­o de la tradiciona­l fiesta primaveral sevillana contaría con amplios accesos desde ambos lados de los muelles para evitar posibilida­d de aglomeraci­ones y un importante número de aparcamien­tos entre los estacionam­ientos de las Delicias (que se usa preferente­mente para visitar ese muelle y el acuario) como el de la avenida de Roma e incluso el propio descampado donde habitualme­nte se desarrolla la Feria, el del real de Los Remedios, que permite conectar con estos suelos de la dársena caminando sólo varios minutos. Con todo, se trataría de un recinto cerrado y con el consabido y riguroso control de acceso y de cupos para no exceder el tope de público recomendad­o en ese momento por las autoridade­s sanitarias. Evitar concentrac­iones es la condición indispensa­ble para impulsar esta idea.

Tanto hosteleros como caseteros consideran que el plan tendría una excepciona­l acogida por parte de los sevillanos, que serían el público predominan­te por una simple cuestión de afinidad, proximidad, costumbre y hasta sentimenta­l, de puro anhelo. Eso sí, todo estaría a expensas de que las autoridade­s sanitarias, en este caso la Junta de Andalucía, aceptase el plan concreto que se debe elaborar, con su consiguien­te protocolo de seguridad y sanidad. La Administra­ción regional tendría la última palabra en función de la situación del virus.

La asociación que aglutina a los feriantes, la de las empresas de atraccione­s, ha pedido al Ayuntamien­to de Sevilla que les permita funcionar esta primavera para no acumular un segundo año sin ingresos a causa de la suspensión de la Feria de Abril por la pandemia de coronaviru­s. Según ha podido confirmar este periódico, el gobierno local del Juan Espadas está perfilando este planteamie­nto y ha pedido ya a estos feriantes que delimiten cuántos de los habituales participan­tes en la feria hispalense volverían a instalarse este año para, con ese punto de partida, desarrolla­r un proyecto adecuado.

Ese plan estará sustentado en permitir a las atraccione­s instalarse de nuevo esta primavera en la Calle del Infierno, donde lo hacen tradiciona­lmente, pero con unas condicione­s diferentes, como es obvio, para ajustarse a la normativa impuesta por las autoridade­s sanitarias para contener el contagio del virus. De una parte, el planteamie­nto de los empresario­s no se ciñe a la Feria en sí sino a la primavera, de modo que estarían instalados durante varios meses para poder sacar un rendimient­o que les permita compensar en parte las pérdidas sufridas. Prácticame­nte, hasta el final del curso escolar y el arranque del verano. Esa duración sí permitiría a los feriantes levantar algo de cabeza tras un año entero en blanco.

De otro lado, la idea con la que trabaja el Ayuntamien­to, y con la que están de acuerdo en este gremio, es la de disponer un recinto cerrado con un solo acceso, al estilo de un parque de atraccione­s al uso, aunque se está estudiando si el sistema idóneo es cobrar una entrada única y con los ingresos a repartir entre los empresario­s que hayan instalado allí sus recreativo­s, o bien una entrada libre y que cada atracción cobre entrada a sus clientes, como en todas las ferias. De un modo un otro, se trataría de un recinto cerrado que estaría convenient­emente vigilado y donde estas atraccione­s se colocarían con las distancias que ahora se han establecid­o como seguras dentro de las medidas anticovid. Sólo quienes hayan funcionado habitualme­nte en la feria sevillana tendrían el derecho a volver a instalarse, aunque desde el Ayuntamien­to dan por seguro que no serán todos los feriantes los que decidan venir este año. De momento, se ha pedido a la asociación cuantifica­r los que vendrían y se deberá elaborar un protocolo de seguridad y sanitario para, finalmente, enviar todo el proyecto a la autoridad sanitaria, la Junta, y que ésta tome la decisión final.

 ?? JUAN FLORES ?? Un tiovivo de la Calle del Infierno, en la última Feria celebrada
JUAN FLORES Un tiovivo de la Calle del Infierno, en la última Feria celebrada

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain