Cs abre una ronda de contactos en Bormujos para echar al alcalde
La suma de concejales con el PP supera a la del PSOE con Podemos
El portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Bormujos y primer teniente de alcalde en el Gobierno de coalición conformado entre el PSOE y la formación naranja en este municipio, Manuel Romero, anunció ayer que va a iniciar esta semana «una ronda de contactos con todos los grupos para garantizar un gobierno limpio y estable», al no dimitir el alcalde, el socialista Francisco Molina, pese a las demandas en ese sentido por el juicio que afronta por presunto delito de prevaricación. Molina nunca hizo público que había sido procesado por este motivo y que será juzgado el próximo mes de junio. Y cuando ABC lo desveló, se agarró al pretexto de que es una cuestión administrativa y no penal, pese a que la Fiscalía pide para él 12 años de inhabilitación, y que todo se trataba de una campaña de «acoso y derribo» promovida a su entender por el PP en su contra para desencadenar una moción de censura, acusando a Cs de haberse unido a dicha campaña.
«Lamentamos profundamente el egoísmo de Molina», manifestó Romero, defendiendo que ante el «inmovilismo» del alcalde, al que han reclamado su dimisión Cs, el PP y Vox a cuenta del mencionado juicio que afronta, la formación naranja, que cogobierna junto al PSOE, debe «trabajar en la composición de un gobierno sin cargos imputados por corrupción política», pesando sobre el primer edil un presunto delito de prevaricación por la autorización de unas obras en una nave municipal pese a contar con informes desfavorables de la Intervención y del arquitecto municipal.
«Ciudadanos tiene líneas rojas y una de ellas es la regeneración política», reiteró Manuel Romero, apostando por buscar «la mejor solución para dar estabilidad al gobierno de Bormujos». De este modo, mientras Molina avisaba hace pocos días de que desde su punto de vista las fuerzas de la derecha han ido «construyendo un relato» desde septiembre para llegar al punto actual de la disyuntiva entre su dimisión «o la moción de censura» en su contra, Cs defiende que esta «crisis institucional» deriva de la negativa del alcalde y su concejal de Obras Públicas, la también socialista Carmen Garfia, a dimitir pese al juicio promovido en su contra por presunta prevaricación con la mencionada licencia de obras.
Según Romero, «la negativa del PSOE a cesarles para mantener el gobierno ha roto la gobernabilidad de Bormujos y el municipio merece un gobierno limpio, dedicado exclusivamente a mejorar la vida de los vecinos». Así las cosas, Romero volvió ayer a pedir «altura de miras» al resto de grupos municipales para «dejar a un lado los intereses partidistas y apostar por una gestión transparente y honesta, al servicio de los intereses de los vecinos». «Ya basta de que se siga manchando la imagen de un pueblo trabajador y honesto como es Bormujos», añadió el portavoz.
La suma de Ciudadanos con el PP, que tienen cinco concejales cada uno, sería suficiente para cambiar de gobierno en este municipio sevillano, ya que el PSOE tiene siete y sólo contaría con el apoyo de Podemos, que tiene dos, mientras que Vox tiene otros dos. Las horas de Molina como alcalde están contadas.
El portavoz de Cs «Trabajaremos en la composición de un gobierno sin cargos imputados», aclara