Críticos catalanes de Cs piden ceses en la dirección
Ciudadanos (Cs) sigue lamiéndose las heridas del fracaso estrepitoso vivido en las elecciones catalanas del pasado domingo en las que los de Inés Arrimadas pasaron de 36 a seis escaños y descendieron de la primera a la séptima posición. Una debacle sin paliativos que algunos sectores de la formación liberal pretenden saldar con dimisiones (ya han señalado al candidato naranja el 14-F, Carlos Carrizosa) y un ambicioso viraje estratégico.
Precisamente esos son dos de los objetivos que tiene Renovadores Cs, una corriente crítica presentada ayer en Barcelona. «Hay personas que deberían seguir el camino de Albert Rivera. Él hizo algo muy digno, tuvo la dignidad de marcharse. ¿Cómo es posible que ahora algunos no hayan puesto su cese encima de la mesa?», explicó este martes en rueda de prensa Antonio Espinosa, diputado de la anterior legislatura en el Parlament y uno de los portavoces de este grupo renovador. Según desveló, decenas de cargos locales, autonómicos y nacionales de la formación liberal se están organizando para hacer sentir su voz y forzar un cambio en la deriva del partido. «Cs no necesita maquillaje, necesita cirugía urgente, si no, necesitará un forense. Necesita cambios de verdad», alertó Espinosa.
El dirigente naranja evitó dar detalles sobre el número de personas que integran su corriente, pero aseguró que el partido está en «ebullición» en estos momentos.