«No voy a entrar en si hay o no que renovar el PSOE-A»
licías que dentro de una actividad privada protagonizaron estos hechos detestables sobre los que está actuando la Justicia y administrativamente la Dirección General de la policía Nacional. Pero no me quedo en una generalidad ni siquiera justificando por la crisis económica y el desempleo que pueda sufrir Linares o por las distintas crisis que como la de Santana ha sufrido este municipio. Jamás justificaré que una crisis económica o el desempleo sean motivo para los altercados que tuvieron como detonante este hecho puntual. Hay que hacer una llamada a la calma.
–Ni la pandemia ni el cierre de fronteras ha acabado con la inmigración. ¿Tirarse los trastos entre administraciones sobre el control y la atención a los inmigrantes no termina siendo perverso y alienta argumento para la xenofobia?
–Es peligroso y es un tema muy sensible que puede despertar esos sentimientos que entiendo todos detestamos. Pido mucha tranquilidad, coherencia y solidaridad y cuidado con los mensajes que nos perjudican como sociedad. Yo se lo he dicho al presidente de la Junta, porque es un tema muy sensible y estamos hablando de seres humanos, por eso debe imperar la solidaridad. Nuestra obligación es darle una alternativa en la red de acogida.
–Los Ayuntamientos andaluces han recibido del Gobierno en el último año menos fondos en la lucha contra la violencia machista. ¿Qué opina sobre el enfrentamiento ideológico que supone la gestión de estas políticas?
–Una gran labor del Gobierno en colaboración con ayuntamientos y Junta es materializar con financiación el Pacto de Estado contra la violencia de género. Tenemos que trabajar todos desde la mayor coordinación y lealtad institucional posible; aquí no estamos hablado de cualquier cosa, hablamos de que están matando a la mujeres y es un tema muy serio. Vamos a dejarnos de ideologías y de otras palabras que no quiero nombrar. Lo que no puede ser es que a estas alturas tengamos partidos políticos, que además tengan representación institucional, que nieguen la evidencia de la violencia de género.
–La información y los pactos para las políticas de prevención no logran evitar la violencia machista. ¿Es un fallo general de la sociedad?
–Todavía tienen que pasar más generaciones para que se nos vea a hombres y mujeres desde la igualdad. La mayor aberración de la desigualdad es la violencia de género. Si durante mucho tiempo hemos estado recibiendo una educación sesgada y patriarcal en la que el hombre es superior a la mujer, hasta que se cambie esa percepción debe pasar un tiempo, por eso es fundamental abordar este asunto desde la educación, desde el ámbito judicial y social.
–¿Cómo cree que anda España de normalidad democrática?
–Creo que es un país totalmente democrático, como es reconocido por los informes nacionales entre los 24 paí
–Su nombramiento se vinculó a un consenso de las direcciones regional y federal del PSOE. ¿Se siente sometida a esa presión?
–El PSOE es una única familia. Mi nombramiento obedece a Pedro Sánchez, al que le estoy agradecida por su confianza, y a ese acuerdo que había y sigue existiendo entre el presidente del Gobienro y la secretaria general del PSOE A
–¿Cree que su mandato está al albúr de las hostilidades previas a los congresos de este año?
–Yo soy aquí una mandá. Lo que estoy es para lo que me diga mi presidente del Gobierno. Mientras tenga la confianza de Pedro Sánchez aquí estaré. Yo estoy en mi labor institucional. Soy militante socialista y estoy aquí por esa condición, pero que los árboles nos dejen ver el bosque. Somos un partido único, cohexionado y fuerte y los temas internos los vemos internamente.
–Cree que, tras el éxito de la operación Illa, Susana Díaz debe dar un paso atrás como hizo Iceta en su momento?
–No entro en los que tenga que hacer la secretaria general del PSOEA. Es una decisión que le corresponde a ella y ahora mismo, vuelvo a decir, se está haciendo una buena labor de oposición en el Parlamento andaluz. Ellos están en la labor que les corresponde como oposición y el Gobierno en la gestión de esta crisis sanitaria y económica. En eso es en lo que nos tiene que encontrar la ciudadanía, en el trabajo permanente.
–Destacados dirigentes del partido y el Gobierno hablan de la necesidad de renovación del PSOE andaluz. ¿Usted no?
–No voy a entrar en si hace falta o no esa renovación. Como militantes tenemos que respetar todas la opiniones. El PSOE es un partido que habla con libertad. Ahora hay que trabajar. Ya se hablará cuando toque.