La pandemia remite y vuelve a las cifras de la pasada Navidad

El llamado «efecto lunes», día en que la Consejería de Salud notifica lo que ocurre el domingo anterior, puede ejercer un efecto favorecedor sobre los datos pandémicos pero hay una realidad que no se puede discutir: hace muchos días (y bastantes lunes) que Sevilla no registraba unas cifras tan «buenas» de contagios y fallecimientos. El adjetivo «buena» hay que entenderlo siempre en el contexto de una tercera ola que se ha llevado por delante a tantas personas por Covid-19 (más que la segunda y la primera), puso contra las cuerdas hace tres semanas a todos los hospitales sevillanos, desbordó literalmente a Valme y Bormujos, y convirtió al antiguo Hospital Militar, felizmente recuperado, en un rescate providencial.

En las últimas veinticuatro horas no se ha producido ningún fallecimiento por coronavirus y hay que remontarse al 11 de enero, hace mas de cuarenta días, para encontrar un precedente. Cuarenta días y seis lunes. Para hallar otro día con menos contagios hay que irse aún más lejos, al 28 de diciembre del pasado año. Y no fue lunes sino martes. Ese día hubo sólo 77 nuevos positivos. Y después de ese día llega hoy, con 118.

También se mantiene un día más la tendencia descendente en incidencia hospitalaria, es decir, número de pacientes hospitalizados. El domingo bajaron de 400 por primera vez en más de un mes (388) y ayer eeran 382, seis menos. También baja la ocupación de plazas UCI de 98 a 95 sin que haya mediado ninguna defunción, algo que tampoco ocurría desde principios de enero.

Es muy posible que este martes las cifras sean peores. O no. La pasada semana hubo bastantes muertes por coronavirus en los hospitales sevillanos y todo indica que ésta no tendrá tantas. Su primer día (imposible, mejor) es, cuanto menos, esperanzador.