«Si el PP no es fuerte, el que gana es Pedro Sánchez»
Susana Díaz dice que «no es la misma, he aprendido mucho de los golpes»
La secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, que optará a la reelección en las primarias, manifestó ayer que no es la «misma» de hace años, porque de los «golpes de se aprende mucho», y defendió el proceso de «renovación interno muy fuerte» que ya se ha llevado a cabo en el partido en Andalucía. «Yo no soy la misma Susana de hace años unos años porque cuando te dan muchos golpes...», según expresó la dirigente socialista en declaraciones a Antena 3 donde explicó que ha cambiado en «paciencia, templanza y en ver las cosas de otra manera», así como a la hora de combinar la pasión con la «escucha activa y el aprendizaje permanente».
Quiso dejar claro que no acudirá a las primarias para «competir» por liderar el PSOE-A, sino «para que los socialistas volvamos al Gobierno andaluz». Insistió en que sabe que los cambios que «se están llevando a cabo en el PSOE andaluz, dando el testigo a una generación distinta a la de los 37 años genera críticas, pero también estamos preparados para eso». Susana Díaz declaró que en los dos años que el PSOE-A lleva en la oposición en Andalucía han reconocido «errores y han aprendido de aquellas cosas que se pueden hacer mejor», al tiempo que se ha desarrollado un proceso de «renovación interno muy fuerte» que no ha estado exento de «críticas». «Cuando haces cambios importantes porque entiendes que tenemos la generación más preparada de la historia de Andalucía, les toca y nos toca diseñar una Andalucía post-Covid que será diferente», dijo.
Las primarias
Afirmó que, al final, la decisión sobre quién lidera el PSOE-A la van a tomar los militantes andaluces en las primarias e indicó que no será la primera vez que se someta a unas primarias, unas veces «mejor y otras peor e incluso de los golpes se aprende mucho». Insistió en que Andalucía merece un PSOE «dialogante, actual, moderno y que afronte el futuro con una visión más coetánea de la tierra que tenemos que gestionar». Respecto a si ha recibido alguna llamada de la dirección federal del PSOE pidiéndole que dé un paso atrás, señaló que ellos saben que su compromiso es con Andalucía, y que tiene la mente, la ilusión y el esfuerzo puesto en esta tierra, mientras indicó que el PSOE-A no ha vuelto a perder unas elecciones. Por último, señaló que la victoria de Salvador Illa en las elecciones catalanas la vivió con «alegría» porque ganaba su compañero.
—Se acerca el 28 F. Después de dos años de gobierno y con una crisis sanitaria, ¿cómo ve la salud del PP andaluz y del Gobierno de Moreno? —Creo que el Gobierno de Juanma Moreno es un ejemplo y estoy muy orgulloso de cómo ha cambiado Andalucía durante este tiempo. En la crisis sanitaria, mientras que Sánchez ha dado la espantada, el Gobierno de Juanma Moreno ha dado la cara. Creo que ha conectado con una gran mayoría de andaluces; sólo hay que ver cómo lo recibe la gente en las salidas que está haciendo como presidente de la Junta a los distintos municipios de Andalucía.
—¿Cuál es la causa del resultado del PP en las elecciones catalanas?
—El resultado ha sido muy malo. El presidente Casado ya explicó en el Comité Ejecutivo nacional que vamos a llevar a cabo una estrategia en Cataluña para reforzar la estructura del partido. Estamos analizando de forma detallada lo que ha pasado, pero tenemos que dejar bien claro que el caso Bárcenas y la abstención nos han afectado. Si contemplas el resultado final, por poco más de 1.000 votos hubiéramos conseguido un escaño más en Tarragona.
—Habla de abstención, pero tampoco han rescatado ni un voto de la estampida en Ciudadanos. ¿El constitucionalismo tiene alguna opción en Cataluña?
—Creo que tiene opciones y que el Partido Popular va a ser clave en Cataluña, pero tenemos que reforzarnos. Cuando los catalanes se movilizan, normalmente el independentismo retrocede. El problema aquí es que Pedro Sánchez y su operación Illa lo han reforzado, y muchos catalanes se quedaron en casa porque entendieron que el Partido Popular no era una alternativa de Gobierno. Tenemos que trabajar para cambiar esa idea.
—¿Va a haber un antes y un después en la forma de concurrir del centroderecha?
—Si el Partido Popular no es fuerte, el que gana es Pedro Sánchez, así que el objetivo es que en las siglas del PP quepa todo el votante de centroderecha y también el votante socialista descontento, que lo hay y mucho.
—¿Y qué papel juega Ciudadanos en esa estrategia?
—Ciudadanos es un partido con el que estamos en varios Gobiernos, como el de Andalucía, que está funcionando bien. La fórmula de Juanma Moreno es una fórmula de éxito y muchas de las medidas que está implantando en Andalucía son medidas que queremos llevar a la Moncloa cuando Pablo Casado obtenga la presidencia. Pero a partir de ahí, somos partidos distintos y nosotros nos dirigimos a los votantes: la única opción viable y sensata y moderada es el Partido Popular.
—¿España Suma está sobre la mesa? Díaz Ayuso hablaba de «fusiones»…
—Sí, pero añadió que era bajo las siglas del Partido Popular. Nosotros esa idea la tenemos muy muy clara.
—El propio Moreno ha reconocido el papel de Ciudadanos y Juan Marín en la estabilidad del Gobierno. ¿El futuro del centroderecha en Andalucía pasa por un pacto PP-Cs?
—Eso lo tendrán que decir las urnas. Antes he destacado que la fórmula de Juanma Moreno es un éxito y parto del respeto a Ciudadanos porque forma parte de muchos Gobierno autonómicos y locales con el Partido Popular. Desde luego, en las próximas elecciones andaluzas, y todavía queda bastante, me apuesto lo que usted quiera a que el presidente va a seguir siendo Juanma Moreno.
—¿Qué rédito espera sacar el partido abandonando la sede de Génova?
—Marcharnos de Génova no significa renegar del pasado del Partido Popular, sino rechazar aquello que se hizo mal. Se lanza un mensaje rotundo en defensa de la transparencia y la ejemplaridad.
—¿Le está costando más de lo esperado a Pablo Casado esquivar la estela de la corrupción?
—Hay muchos procesos judiciales que están abiertos y desde el respeto a los procedimientos y a la presunción de inocencia lo que hemos dicho muy claro es que ya basta. Con este gesto simbólico (la salida de Génova), pero también con su discurso, la dirección nacional dice que no va a seguir respondiendo a este señor. —Volvemos a ver revueltas en Madrid y en Cataluña. Esta vez por el encarcelamiento de Pablo Hasél. ¿Hay un discurso incendiario en las instituciones?
—El problema no es Pablo Iglesias. Todos sabíamos quién era y qué pensaba. Aquí el problema es Pedro Sánchez. Si condena la violencia, que cese a quien ampara la violencia. Él es quien tiene el botón rojo para pulsarlo y sacar del consejo de ministros al señor Iglesias, pero hoy es cómplice con su silencio.
«Ciudadanos y PP somos partidos distintos; para los votantes la única opción viable, sensata y moderada es el Partido Popular»