Un juzgado de Carmona instruirá los malos tratos en las residencias
La Fiscalía de Sevila remite la investigación penal llevada a cabo durante dos meses
Un juzgado de Instrucción de los de Carmona será el encargado de llevar la causa sobre los presuntos malos tratos en dos residencias de mayores de Sevilla, y por los que la Fiscalía, quien ha estado dos meses trabajando en el asunto, ha tomado declaración como investigadas en varias ocasiones a las directoras de ambos centros.
El fiscal delegado para la Protección de Personas Mayores y de Personas con Discapacidad en Sevilla, Norberto Sotomayor, tal y como adelantó este periódico en el mes de diciembre, abrió una investigación penal contra tres residencias de la provincia, entre otros motivos, por presuntas situaciones de malos tratos contra los mayores, falsificación de documentos sanitarios e incumplimientos de las medidas decretadas por las administración para luchar contra el coronavirus, sobre todo, las referentes a la movilidad, con traslados de ancianos de un centro a otro cuando no estaba permitido.
Centros cerrados
Dicha investigación sobre los presuntos malos tratos se focalizó en dos de estos centros, hasta tal punto que la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación y Bienestar Social de la Junta ordenó el cierre cautelar de estas residencias.
En concreto los centros de mayores investigados son los de San Laureano, en Alcalá de Guadaíra, y de La Alegría, en Carmona. El compromiso de la Junta ante tal decisión fue el de que reubicar a los ancianos residentes en otros centros. Algunos han vuelto con sus familiares.
Todo parte de las actuaciones llevadas a cabo por la inspección de la Consejería de Rocío Ruiz sobre las residencias de Sevilla durante el pasado año 2020. En estas visitas los funcionarios detectaron situaciones que bien podrían calificarse de inhumanas frente a personas especialmente vulnerables como son los mayores, quien además han sido los más azotados por la pandemia del coronavirus.
Acostados en sus camas con la ropa de todo el día y los zapatos puestos, bolsas de basuras rellenas de papel haciendo las veces de almohada, suciedad o falta de higiene son algunas de las situaciones denunciadas por el servicio de inspección de la Consejería y puestas en conocimiento, a través de decenas de informes, de la Fiscalía durante estas últimas semanas.
El Ministerio Público, desde que incoara las diligencias de investigación a finales de diciembre, ha estudiado concienzudamente este asunto, ha tomado declaración a las investigadas y ha escuchado las testificales de trabajadores de los centros y de profesionales sanitarios.
Ahora, una vez finalizadas estas actuaciones preliminares, pone en conocimiento del juzgado una denuncia muy detallada y estructurada de todos los hechos a lo largo de centenares de folios, según han confirmado a este periódico fuentes fiscales.
Tras resolver la cuestión relativa a qué juzgado llevar el caso al tratarse de dos centros ubicados en distintos partidos judiciales, la Fiscalía remitirá en las próximas horas todo el trabajo de investigación realizado a los juzgados de Carmona.
Durante estos dos meses de trabajo, el fiscal Norberto Sotomayor ha tomado declaración a las directoras como investigadas. La última ocasión se acogieron a su derecho a no declarar ante preguntas muy concretas sobre los hechos.
Falsificación de firmas
Uno de los delitos que se investiga es falsedad documental, pues la inspección de la Junta detectó posibles certificados médicos falsos, errores en la administración de los medicamentos y prescripciones médicas fraudulentas. Las directoras apuntan que actuaron conforme a las indicaciones del médico.
Esto choca frontalmente con lo que aseguró el facultativo al fiscal. Este doctor manifestó la firma que consta en dichos informes, incluidos los certificados de PCR y otros documentos sanitarios, no es la suya.
En este sentido, además, aportó documentos para exponer al fiscal la que es su verdadera firma.
Sotomayor también ha podido escuchar los testimonios de trabajadoras de la residencia la Alegría, de Carmona, que le han aportado vídeos y fotos de las situaciones denigrantes que han tenido que sufrir los residentes, así como la falta de higiene. Según el fiscal, a falta de más detalles de la inspección de la Junta, la denuncia en el juzgado se hará en los próximos días.
Se investigan malos tratos, falsificación documental y quebrantamiento de medidas por el Covid-19