Bendodo insta al máximo control en los aeropuertos
Turista sin rumbo
Nuevo varapalo al turismo andaluz. Boris Johnson, primer ministro británico, anunció este lunes que la prohibición de viajar fuera de las islas se extendía hasta el mes de julio. La razón es el miedo a que los efectos de la tercera ola del coronavirus también sacudan con más dureza a Gran Bretaña. «Es horroroso», lamenta Miguel Sánchez, presidente del Consejo de Turismo de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA).
Es otro jaque para unos negocios que están siendo maltratados por la pandemia. Empleados en ERTE, negocios cerrados y un horizonte que no acaba de abrir las puertas a los turistas. Con ese panorama la esperanza era que, con la vacunación, hubiera un regreso con la llegada del calor, aprovechando el período vacacional de mayo. «La mayoría estábamos pensando en abrir en la segunda quincena de mayo», señala Sánchez a ABC, que explica que la ampliación de la prohibición en el mayor mercado emisor obliga a replantear lo pensado.
Un tercio de la demanda
Según los datos de CEA, el turismo británico representaba sobre el 34 por ciento del volumen de visitantes a Andalucía antes de la pandemia. La recuperación de estos turistas es clave para que los negocios funcionen de forma adecuada, pero la incertidumbre lleva instalada un año sin arrojar certezas. «Es desesperante», asegura Sánchez.
Los planes del Gobierno británico son un nuevo jarro de agua fría y generan incomprensión en algunos de los directores de hoteles en Andalucía. «Es una noticia muy negativa y que no se entiende desde un punto de vista sanitario, cuando hoy en día para viajar hay que hacerse una PCR negativa para entrar y salir», afirma Julián Cabanillas, director de Marbella Club Hotel, que ha apostado por los clientes de larga estancia para mantenerse durante el último año. Estas prohibiciones no sólo afectan al sector hotelero andaluz, sino que también están golpeando otros sectores como las aerolíneas. Estas empresas ya han decidido no lanzar previsiones sobre número de asientos ni destinos. «Se cancelan muchos vuelos», explican en el Aeropuerto de
El 34 por ciento
Los viajeros procedentes de Gran Bretaña suponían, antes de la pandemia, una tercera parte de los visitantes de Andalucía, con predilección por el turismo de sol y playas en la Costa del Sol, Almería y Cádiz.
Sin previsiones
Los aeropuertos no aportan previsiones de vuelos para Semana Santa ante la volatilidad de la demanda y los constantes cambios de medidas Covid de los principales países emisores.
Las últimas restricciones en origen llevarán a mínimos los viajes turísticos de Semana Santa. Los aeropuertos registran solo una relción testimonial de vuelos para la próxima semana. A pesar de la situación, el consejero de Presidencia y portavoz del Gobienro andaluz, Elías Bendodo, pedía ayer al Gobierno central mayor control en los aeropuertos ante la llegada de viajeros procedentes del extranjero, de manera que quienes lleguen lo hagan con todas las garantías en cuanto al cumplimiento de las medidas de seguridad y con PCR negativa.
Tras recordar que los andaluces tienen restringidos sus movimientos en la comunidad andaluza, de la que no pueden salir, y en la que no pueden desplazarse de una provincia a otra hizo un llamamiento a la delegado del Gobierno en Andalucía: «Si los andaluces hacemos ese esfuerzo, porque no podemos movernos de una provincia a otra, pedimos al Gobierno central que intensifique la vigilancia y los controles para que se cumplan todas las medidas sanitarias ante la llega de viajeros a los aeropuertos», según el consejero. En su opinión, de nada servirán estos esfuerzos que están haciendo los andaluces, si el Gobierno central «mira hacia otro lado y no se controlan las llegadas por vía aérea».
En Navidad, 30.000 británicos llegaron a Andalucía para pasar sus vacaciones antes de la tercera ola de la pandemia.