El exceso del tiempo de juego
Los jugadores que han sido titulares más veces suman casi 30.000 minutos
Julen Lopetegui se quejaba después del partido contra el Elche de la semana pasada de la carga de partidos y del poco tiempo de descanso y preparación del que estaba gozando su equipo. En la rueda de prensa previa al siguiente partido, contra el Valladolid, matizaba que sus jugadores tienen dos piernas y dos pulmones y que estaban acusando lo condensando del calendario. Y no le faltaba razón al de Asteasu en lo que a carga de minutos se refiere, porque los once jugadores que más han jugado suman casi 30.000 minutos, o lo que es lo mismo casi 500 horas de juego.
El que más minutos ha jugado, 3.300, es Bono que ha sido el portero titular en 36 partidos de los 43 partidos disputados hasta el momento entre LaLiga Santander, Supercopa de Europa, Liga de Campeones y Copa del Rey. Le sigue muy de cerca Diego Carlos con 3.283 minutos y 37 partidos. Por detrás está el otro defensa central titular cuando las lesiones y el Covid-19 se lo han permitido, Jules Koundé que ha jugado 3.226 minutos en 39 partidos.
Ya por debajo de los 3.000 minutos se encuentra Fernando, que ha disputado 2.772; seguido de Jesús Navas, con 2.745; Joan Jordán, con 2.739;
Ocampos, con 2.629; Rakitic, con 2.524; En-Nesyri, con 2.377 minutos, aunque es el que más partidos ha jugado; Suso, con 2.152; y Acuña con 2. 077. El resto de jugadores está por debajo de los 2.000 minutos jugados. De los once que más han jugado cabe señalar que cinco han estado lesionados o con molestias en algún momento de la temporada. El Barcelona, que suma
De los once jugadores con más minutos, cinco han sufrido alguna lesión esta temporada
los mismos partidos que el Sevilla esta temporada, tiene a cinco jugadores que superan los 3.000 minutos jugados: Frenkie de Jong, Messi, Jordi Alba, Griezmann y Ter Stegen.
Pero lo que realmente puede propiciar que en esta temporada haya habido un mayor número de lesionados, mientras que la enfermería del conjunto sevillista a penas se usó el año pasado, no es el tiempo de juego, porque al final casi todas las temporadas se juega el mismo número de partidos, sino la falta de tiempo de descanso y recuperación entre partidos el Sevilla ha jugado dos veces por semana con cuatro días de media entre partidos.