Cs y PSOE lanzan en la ciudad de Murcia su tercer órdago al PP
Las mociones de censura en la Asamblea de Murcia o en las Cortes de Castilla y León, con permiso de la disputa electoral abierta en la Comunidad de Madrid, han centrado todos los focos en las últimas semanas. Sin embargo, el movimiento de Ciudadanos (Cs), de la mano del PSOE, para desalojar al PP del poder en múltiples plazas tiene otra batalla, aunque menos mediática: el Ayuntamiento de Murcia. La semana pasada, el PP desactivó la moción de censura contra Fernando López Miras, esta ha hecho lo propio con la presentada contra Alfonso Fernández Mañueco, pero hoy es el momento del Consistorio de Murcia, donde PP y Cs compartían el poder y en los últimos meses han visto cómo su relación se ha ido progresivamente deteriorando. El punto de ruptura entre ambos grupos tiene nombres y apellidos. Se trata de Mario Gómez, el primer teniente de alcalde en el municipio, que ha estado en el centro de varias polémicas.
Primero el PP denunció que Gómez se sirvió de una argucia legal para asegurarse una plaza de funcionario en Yecla. El caso trascendió en verano del año pasado, cuando se supo que el teniente de alcalde se dio de baja en la Seguridad Social durante cuatro días para tomar posesión de una plaza de funcionario en el Sistema Murciano de Salud. Asegurada la plaza, retomó la cotización como concejal con dedicación exclusiva. El movimiento, que expertos legales consultados por ABC dicen que es legal, fue muy criticado por el PP que lo consideró, cuando menos, poco ético.
Pero el conflicto no quedó ahí y el fuego cruzado se reavivó después de que el primer teniente de alcalde denunciara ante la Policía presuntas irregularidades cometidas en procesos de contratación por la corporación municipal que encabeza José Ba