Facebook suspende la cuenta de Maduro por sus invenciones
El dictador publicó en la red social que un compuesto de aceites cura el coronavirus
La mayor red social del planeta, Facebook, ha suspendido la página oficial del dictador venezolano, Nicolás Maduro, por sus varias publicaciones en que defiende remedios falsos para tratar el coronavirus, según ha anunciado un portavoz de la empresa californiana. El régimen chavista ha respondido que Facebook practica «el totalitarismo digital». Maduro dijo en un vídeo publicado en Facebook en enero que el carvacrol, o cimofenol, que se encuentra en aceites esenciales de orégano y tomillo, neutraliza el coronavirus sin efectos secundarios, una invención sin validez científica o médica. No hay ningún medicamento que cure el coronavirus, y de momento los gobiernos del mundo han optado por una vacunación masiva.
La agencia Reuters fue la que reveló esta suspensión. Después, la empresa digital ha dicho en un comunicado que sigue «la guía de la Organización Mundial de la Salud que dice que actualmente no hay medicamentos para curar el virus». «Debido a las repetidas infracciones de nuestras reglas, suspenderemos la página durante 30 días, durante los cuales será de solo lectura». Los administradores de la página oficial de Maduro fueron notificados de la violación de sus políticas, según dijo el portavoz de Facebook.
Maduro utiliza con frecuencia las redes sociales, incluidos Facebook y Twitter, y en ocasiones ha transmitido discursos en ellas en directo. En sus diatribas, el dictador ha proferido todo tipo de insultos y amenazas, y ha expresado abundantes falsedades sobre todo tipo de asuntos, incluidas las verdaderas dimensiones de la crisis humanitaria que padece Venezuela y las prácticas de secuestro, tortura y ejecuciones sumarias de las que es responsable la cúpula chavista, tal y como ha denunciado la secretaría general de la Organización de los Estados Americanos.
En un comunicado emitido el domingo, el Ministerio de Información de Venezuela, portavoz del régimen, dijo que Facebook censura «contenido orientado a combatir la pandemia» y describió al carvacrol como un retroviral de «producción e ingeniería nacionales». «Estamos padeciendo un totalitarismo digital ejercido por empresas supranacionales que quieren imponer su ley en los países del mundo», dijo el ministerio.
Dado al secretismo, el régimen no ha sido en absoluto transparente sobre la verdadera dimensión de la pandemia en una Venezuela ya de por sí castigada por una crisis humanitaria sin precedentes en el continente americano.