«Hay un deterioro de valores y la familia es la que más ha sufrido»
–Hoy la mentira tiene un valor moral en política. Una sociedad que la acepta, ¿está condenada?
–Creo que en la sociedad hay un cierto deterioro en valores. Esto es evidente. No hay más que asomarse a los medios de comunicación. Ver blogs que son verdaderas cloacas, donde se dicen mentiras y se ofende impunemente. Lo que esto me dice como obispo es que tengo que evangelizar en esta sociedad que presumía de que era una sociedad de cristiandad. Resulta que ha dejado de ser, de vivir y de pensar en cristiano. ¿Qué tenemos que hacer ahora? Lamentarnos, no. Tenemos que recuperar lo perdido, metiendo el Evangelio en el sentir y en el vivir de la sociedad.
–¿La desestructuración de la familia dificulta esta labor?
–Claro. La familia, básica para la sociedad, es una de las instituciones que más ha sufrido el deterioro en estos últimos tiempos. ral del público. Yo creo que, afortunadamente todavía, no siempre la sociedad piensa lo mismo que los planteamientos políticos y que las leyes que se hacen en España. Que nadie vaya de salvador porque hay una sociedad que no piensa así.
–Usted es un pastor social, a su juicio ¿qué ha sido peor, el coronavirus o la coronacrisis?
–El coronavirus, que es la causa de todos los males que han venido y están por venir. Lo que ha originado la crisis económica y laboral es una pandemia de salud pública de unas dimensiones que no sé si somos conscientes de lo que es.
–Parecía que saldríamos mejores de esta crisis, pero somos más egoístas, ¿no cree?
–No quiero emitir juicios porque hay colectivo silencioso extraordinariamente responsable, pero lo que veo es que hay grupos y algunos sectores de edad que no acaban de tomar conciencia de la gravedad de la situación.
–¿El fin del coronavirus propiciará una sociedad nueva?
–La sociedad se renueva siempre. Tengo 75 años y he visto una transformación total del mundo en muchos aspectos. Cuando yo era niño no se parecía en nada al mundo en el que ahora vivo. La sociedad tecnológica, la sociedad mediática, la globalización cultural han supuesto una verdadera revolución. Lo que quiero decir es que la sociedad se transforma. Es verdad que hay cosas que aceleran una determinada conducta. El coronavirus es un fenómeno mundial que dejará una huella que durará mucho tiempo.