ACS ampliará capital por 574 millones de euros para mantener el dividendo
La compañía pondrá en circulación acciones nuevas de 0,5 euros de valor nominal
Mientras remodela su actividad y su cúpula, ACS pone en valor el dividendo. La compañía, que acaba de cerrar la venta de su división industrial al gigante francés Vinci por cerca de 5.000 millones de euros, anunció ayer que entregará a sus accionistas 574 millones de euros entre julio de este año y febrero del que viene.
Para costear este pago, la compañía tiene previsto aprobar una ampliación de capital por este mismo importe en la junta general de accionistas que celebrará el próximo 7 de mayo. Así lo reconoció la empresa en la convocatoria de este evento, que fue remitida ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El aumento del capital se ejecutará mediante la emisión de nuevas acciones de 0,5 euros de valor nominal y con la misma consideración que los títulos que están actualmente en circulación. No habrá prima de emisión y serán asignadas gratuitamente a los accionistas. En cualquier caso, la ampliación no podrá superar los 574 millones de euros.
La operación se dividirá, previsiblemente, en dos ejecuciones: la primera, de 426 millones de euros, que tendrá lugar dentro de los tres meses siguientes a la fecha de la junta, y una segunda de 148 millones no más tarde de marzo de 2022. Las ampliaciones serán sufragadas íntegramente con las reservas del grupo. Con este sistema, la empresa de infraestructuras atenderá al pago de los dividendos mediante la fórmula del «scrip dividend», que consiste precisamente en remunerar a los accionistas con títulos en lugar de efectivo.
Los 574 millones de euros que recibirán los accionistas de ACS se unirán a los 46,2 millones que repartió la empresa como dividendo compensatorio con cargo al ejercicio de 2020. Así, los accionistas del grupo recibirán más de 620 millones de euros, una cifra similar a la aprobada en otros ejercicios, pese al Covid-19.
La venta de Cobra
Más allá del dividendo, durante la junta del 7 de mayo también se abordará la reelección de Carmen Fernández Rozado y de José Eladio Seco Domínguez como consejeros independientes, así como las cuentas anuales, la gestión del consejo y el informe de remuneraciones de los consejeros. El evento se producirá en un momento de reconversión para la multinacional española. El miércoles pasado, el consejero delegado de ACS, Marcelino Fernández Verdes, anunció que renunciaba a la reelección en el cargo. Un terremoto que sacudió la cúpula de la empresa, ya que Fernández Verdes era la mano derecha de Florentino Pérez y el principal candidato a sucederle en la presidencia del grupo. La tortuosa experiencia de Cimic, filial que dirigía Fernández Verdes, en Oriente Medio parece haber echado por tierra el relevo.
En el ámbito del negocio, el grupo acaba de cerrar la venta de la mayor parte de su división industrial, en la que se encuentra Cobra, a la multinacional francesa Vinci por un máximo de 4.980 millones de euros. Un movimiento producido en plena pandemia que blinda a ACS, que se centrará en la construcción y explotación de infraestructuras.