Doble lazo de sangre y amistad con la Familia Real española
Felipe de Edimburgo estaba emparentado con Don Juan Carlos y Doña Sofía
Con la muerte del Duque de Edimburgo, la Familia Real española ha perdido a un familiar querido y con un peculiar sentido del humor, pero siempre cariñoso y con el que mantuvieron una estrecha relación no solo de sangre sino también de amistad, especialmente con Doña Sofía, cuyo abuelo, Constantino, era hermano de Andrés de Grecia y Dinamarca, padre del Príncipe Felipe.
Pero Felipe de Edimburgo no solo tenía lazos familiares con Doña Sofía; también los tenía con Don Juan Carlos, dos vínculos que se reforzaban en Don Felipe. Y es que la madre del Duque de Edimburgo era la Princesa Alicia de Battenberg, bisnieta de la Reina Victoria de Inglaterra, que era, además, abuela de la bisabuela de Don Felipe, la Reina Victoria Eugenia. No obstante, las circunstancias históricas hicieron que Felipe de Edimburgo tuviese que cambiar su apellido Battenberg (montaña de Batten) por su traducción al inglés, Mountbatten, en unos momentos en los que estaba viva aún la hostilidad entre británicos y alemanes tras la II Guerra Mundial.
Estos parentescos entre las Casas Reales española y británica –y también griega– se debían especiamente a los enlaces matrimoniales de los últimos doscientos años en los que las Familias Reales europeas se casaban entre ellas, tal como establecían las viejas leyes de la Monarquía ahora abolidas o en desuso.
Visitas y contactos
Pero la relación entre estas Familias Reales no solo se ha mantenido por estos parentescos sino que sus miembros las han alimentado con contactos frecuentes y visitas públicas y privadas que se han mantenido con el paso de los años y de las generaciones.
De hecho, cuando Don Felipe y Doña Letizia realizaron hace ahora un año su primera visita de Estado al Reino Unido, la Reina de Inglaterra y el Duque de Edimburgo no solo vieron en su invitado al Rey de España sino también a un miembro de su familia al que conocían desde niño, como conocieron también a sus padres y a sus abuelos y con los que siempre habían mantenido relación, a pesar de los avatares de la política y las circunstancias históricas, que no siempre han sido favorables.
Todo ello influyó en que el Duque