El Ballet Nacional rinde homenaje a Antonio el Bailarín en el Maestranza
El estreno absoluto del espectáculo conmemorativo del centenario del artista será los días 15 y 16 de abril con la Sinfónica en el foso
ntonio vuelve a casa, a Sevilla, y lo hace a través de sus obras y de la danza del Ballet Nacional de España, que él mismo dirigió.
El teatro de la Maestranza, los días 15 y 16 de abril, acoge el estreno absoluto de ‘Centenario Antonio Ruiz Soler’, una obra que rinde homenaje a quien el director de la compañía nacional, el también sevillano Rubén Olmo, calificó como «un genio». El espectáculo sólo podrá verse luego en el teatro Real de Madrid, el día 4 de noviembre, coincidiendo con el nacimiento de Antonio.
Olmo, director del Ballet Nacional, dijo en la presentación que «cuando entré en la compañía sabía que venía el centenario de Antonio, y para mí era importante hacer algo sobre su figu
Ara porque para los profesionales de la danza española es nuestro genio y necesita de estos homenajes para realzar todo lo que hizo por nuestra danza». Antonio fue el primer sevillano en dirigir el Ballet Nacional de España de 1980 a 1983 y coincide ahora que Rubén Olmo, que nació precisamente en 1980, es el segundo sevillano que está al frente de este elenco.
Olmo manifestó que quería recuperar el espíritu del baile de Antonio, «la versatilidad que tenía, no sólo como bailarín sino como coreógrafo», y destacó que «tener sesenta bailarines en escena, en época de pandemia, no es fácil».
Para este homenaje se han recuperado las ‘Sonatas del Padre Soler’, realizadas por Antonio en el año 1953 para su ballet y que luego repuso en el año 1983 cuando dirigía el elenco Nacional. Desde ese año no se han vuelto a poner en escena. «Es una coreografía muy difícil técnicamente. Son nueve sonatas con un aire de Escuela Bolera que Antonio aprendió de los Pericet, pero dentro se nota la pasión que tenía por la danza clásica». Para esta pieza se ha recuperado y restaurado el vestuario original de Antonio y recreado la escenografía que se perdió hace años en una inundación que asoló los depósitos del Nacional. Asimismo, se ha hecho una versión de las partituras por Juan Solana.
El programa continúa con la recuperación del baile ‘El Vito de Gracia’, que Rosario y Antonio representaron en los Estados Unidos en la película ‘Hollywood Canteen’, que progonizó Bette Davis. «Queríamos destacar la figura de Rosario que fue una gran artista».
‘Estampas flamencas’, con coreografías de Miguel Ángel Corbacho y del propio Rubén Olmo, se basa en la estética de Antonio en el flamenco. Así, se baila por martinete, zorongo, taranto y caracoles. «Eran los palos principales que Antonio llevaba en sus programas. Yo he realizado y bailo el taranto y quiero con ello rendir homenaje a uno de mis maestros, Manolo Marín».
La segunda parte se inicia con ‘Asturias’, de Albéniz, interpretado por la sevillana Esther Jurado, con la coreografía de Carlos Vilán, hoy director artístico de la Ópera de Esmirna, «uno de los últimos intérpretes que pudo trabajar con Antonio en la compañía de María Rosa, donde era primer bailarín».
El ‘Zapateado de Sarasate’, una de las obras icónicas de Antonio, será interpretado por el bailarín sevillano Francisco Velasco. Y para terminar este «Centenario», la ‘Fantasía galaica’, obra estrenada en el año 1956 en el Ballet de Antonio y que retomó Antonio Gades cuando estaba al frente del Nacional. «Para mí es uno de los ballets más importantes que tenemos en la danza española. Es de aires de folklore gallego. No es una obra de argumento, y el paso a dos está inspirado en la Santa Compaña. Es uno de los grandes ballets por el que no pasan los años», asegura Olmo.
El Ballet Nacional de España recupera obras como las ‘Sonatas del Padre Soler’ y ‘Fantasía galaica’
Acontecimiento
De «acontecimiento» calificó el delegado municipal de Cultura, Antonio Muñoz, el estreno de este espectácu