César Aira gana el Prix Formentor a toda una carrera inclasificable
La cadena de hoteles Barceló planea dejar el premio en Sevilla como sede fija
lo, «homenaje a un icono de la cultura española y de la danza», y recordó que Antonio, nacido en la calle Rosario y criado en el barrio de San Lorenzo, bailó por última vez en su ciudad en un acto espontáneo en la Bienal de Flamenco de 1988, en un espectáculo dedicado a Cádiz en el hotel Triana. «La ciudad tiene una deuda con Antonio, y espero que con este centenario pueda empezar a saldarse». Anunció igualmente que el alcalde, aprovechando este acontecimiento, entregará al Ballet Nacional de España un «Giraldillo», «el máximo galardón flamenco con el que cuenta la ciudad».
La delegada provincial de Cultura, Susana Cayuela, dijo por su parte que «es un honor para Andalucía que un sevillano dirigiera la compañía nacional y es una gran idea la recuperación de las grandes figuras y sus obras».
Por último, el director del Teatro de la Maestranza, Javier Menéndez, dijo que «este es uno de los grandes acontecimientos de la temporada 20-21 y un momento muy especial», y agradeció al Inaem haberse comprometido a estrenar este homenaje a Antonio en Sevilla, «una de las personas más significativas de la historia de este país». Destacó, además, el compromiso de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, que dirigirá en el espectáculo homenaje a Antonio el maestro Manuel Coves. Y terminó con una frase del propio Antonio: «Yo al baile —decía— le debo todo. El baile a mí, un poquito más de vida».
En primer plano, Francisco Ferrer Lerín, Anna Caballé y Basilio Baltasar. Al fondo, Gerald Martin y Juan Antonio Masoliver Ródenas, que intervinieron vía online
El escritor argentino César Aira ha sido galardonado con el Prix Formentor 2021, que ayer se falló en Sevilla, en reconocimiento a toda una obra muy difícil de clasificar. Dotado con 50.000 euros, será entregado el próximo 10 de octubre en un acto que se celebrará en Túnez. Además, la cadena de hoteles Barceló —el acto se celebró en el Barceló-Renacimiento de la Cartuja— planea dejar el premio en la capital hispalense como sede fija.
El jurado del Formentor, compuesto por Anna Caballé, Francisco Ferrer Lerín, Juan Antonio Masoliver Ródenas, Gerald Martin y Basilio Baltasar en calidad de presidente, ha concedido este galardón a César Aira por «la infatigable recreación del ímpetu narrativo, por la versatilidad de su inacabable relato y por la ironía lúdica de su impaciente imaginación», según se indica en el acta. Asimismo, considera que «la constelación laberíntica de su obra es un inmenso crisol literario para las figuras de la cultura popular, los personajes de la gran ficción narrativa y los motivos visuales de las bellas artes».
Igualmente el jurado subrayó que la escritura de Aira adopta técnicas «cuyo rigor, frescura y soltura recuerdan las claves jazzísticas de la improvisación artística. Sobre las estructuras invisibles de la inspiración, el autor levanta escenarios y voces que desconciertan y alimentan la perplejidad del lector».
Durante su intervención, que fue online, el biógrafo y crítico literario Gerald Martin comentó que «las Letras latinoamericanas están en un momento muy interesante y Aira es muy representativo de Hispanoamérica desde todas las perspectivas».
«Premio polémico»
Por su parte, Juan Antonio Masoliver Ródenas, el otro miembro del jurado que participó online, dijo que «me alegro de que este año no sea un premio obvio. César Aira es un escritor incesante, un Vargas Llosa en miniatura. A lo mejor es un premio polémico, pero todos los premios tienen que serlo y estar en diálogo con los lectores». También señaló que «es un escritor que no pertenece a la tradición de otro escritor. Obviamente ha leído a Borges. Sus cuentos y novelas cortas están continuamente escribiéndose».
La escritora Anna Caballé, también miembro del jurado, resaltó del autor galardonado que posee «una carrera literaria firme y persistente, casi obsesiva». De hecho, afirmó que publica dos o tres libros al año (sus novelas suelen ser cortas). Igualmente subrayó su «capacidad fabuladora» y la «gran erudición» que tiene a la hora de abordar biografías como la de la poeta Alejandra Pizarnik. Una de las obras más relevantes de Aira en ese sentido es el ‘Diccionario de autores latinoamericanos’.
El poeta Francisco Ferrer Lerín señaló de Aira que «no es un autor conocido pero deja perplejo al lector más avezado». Igualmente habló del uso de «una técnica literaria que lo aleja de los demás escritores» y que «engancha a los lectores por sus quiebros».
Por último, el presidente del jurado, Basilio Baltasar, incidió en la idea de que César Aira «es un autor que ha hecho algo que hasta ahora no ha hecho nadie, por eso a la hora de redactar el acta hemos tenido que conceptualizar todas sus peculiaridades». También comentó sobre el Prix Formentor que «hacerlo itinerante le va a dar mucha fuerza y una vocación internacional, ya que sobre todo es un premio que resalta la importancia de la literatura».
César Aira debutó en 1975 con su novela ‘Moreira’. Desde entonces ha publicado más de un centenar de novelas cortas, aparte de ensayos y obras teatrales.
Aira tiene un centenar de novelas cortas con un estilo único e inclasificable con reminiscencias a Borges