Al menos ocho ultras, detenidos por los disturbios del acto de Vox
De 22 a 53 años, tres tienen antecedentes por daños, lesiones, desórdenes y un abuso
Solo ocho días ha tardado la Brigada de Información de la Jefatura Superior de Madrid en dar con los individuos que protagonizaron los disturbios más graves durante el acto de Vox en Puente de Vallecas el 7 de abril. Solo porque han tenido que analizar miles de imágenes, tanto las grabadas por agentes de esa brigada camuflados entre los manifestantes como las publicadas por los medios de comunicación que cubrieron el mitin. Y a esas imágenes, y a quienes aparecían en ellas, había que ponerles nombre y localizarlos.
Ayer desde primera hora de la mañana se desplegó un dispositivo policial en los distritos de Vallecas y Moratalaz que acabó con la detención de ocho varones, de entre 22 y 53 años, primer dato sorprendente por poco habitual, a los que sorprendieron en sus casas y que fueron desfilando durante todo el día por los calabozos del complejo policial de Moratalaz a la espera de pasar a disposición judicial. No obstante, las fuentes consultadas por ABC anticipaban al cierre de esta edición que habría algún arrestado más.
Algunos de los detenidos, según fuentes policiales, son bukaneros, el sector más radical de los seguidores del Rayo Vallecano, y otros eran hasta ahora desconocidos para los agentes. El Movimiento Antirrepresivo de Madrid publicó en su cuenta de Twitter nada más trascender la noticia que estaban «deteniendo a más compañeros por lo sucedido en Vallekas el otro día» y se ofrecía a ayudar en la asistencia letrada.
«A algunos les conocíamos por participar en hechos similares, pero otros son nuevos», explican fuentes policiales. Todos son varones, como se ha dicho, y españoles. Sus perfiles en cuanto a antecedentes son variados. Hay tres arrestados de 22 años, uno de ellos no tiene ni antecedentes ni afiliación a ningún grupo ultra, pero participó en las algaradas, en el lanzamiento de adoquines y botellas a los policías (hubo 21 agentes heridos). Otro de esa misma edad es el que cuenta con la lista de antecedentes más abultada: lesiones, abusos sexuales, desórdenes públicos y de nuevo, lesiones.
El mayor, de 53 años, tampoco tiene ni antecedentes ni ninguna afiliación concreta que se sepa. Otro de los primeros arrestados, este de 23 años, sí es conocido por los agentes de Información por sus actividades en el mundo de la extrema izquierda violenta. Cuenta con detenciones por lesiones, riña tumultuaria y desórdenes.
Uno de los que cayeron en el dispositivo policial de ayer, de 34 años, había sido arrestado por daños y hurto.
Primero se produjeron cinco entradas y detención de otras tantas personas y más tarde, otras tres. Estos tres últimos (22, 53 y 32 años) carecen de antecedentes y no se les vincula con ningún grupo ultra, salvo al último, que consta en las fichas policiales como un conocido bukanero.
«Policialmente hablando, hay alguno de los detenidos que tiene un perfil más conflictivo, pero el resto es gente que se sumó a las algaradas sin calibrar las consecuencias, aunque obviamente se mueve en el mundo de la extrema izquierda», explican las fuentes consultadas.
La Brigada Provincial de Información de Madrid ha podido identificar en poco tiempo a los autores de las algaradas gracias al trabajo previo que realiza desde hace años sobre los grupos radicales de extrema izquierda.