Inquietante
En TVE, Pablo Iglesias acusó a Vox de hacer «apología del terrorismo»
Aunque resulta tentadora y, desde luego, más agradecida la posibilidad de hacer una columnita con jijis y jajas sobre alguna de las innumerables ficcioncillas de las televisiones, o glosar cómo Jorge Javier Vázquez, el Tennessee Williams de Telecinco, enmienda la plana a la justicia y pide jueces especiales y urgentes para Rociito (una ‘jurisdicción Tomate’), se hace obligatorio consignar en la sección lo sucedido ayer en TVE.
Tener que dedicar tiempo a esto es una parte ingrata del trabajo. Todo sea por ABC y sus lectores.
Entrevistado, o algo así, por Jesús Cintora, Pablo Iglesias añadió a su atroz monólogo habitual (en el que no suele haber tiempo para las residencias de ancianos), dos o tres cosas graves, aún más graves por haber sido dichas en TVE y no haber recibido suficiente contestación o contestación alguna.
El ‘milhomes’ y propietario bolivariano dijo que Vox provocó la violencia en Vallecas, y felicitó a los que allí acudieron, especialmente a los ‘ bukaneros’. Añadió que Vox hace «apología del terrorismo», lo que cruza una línea, igual que la cruza limpiar las calles cuando el adversario ha dado un mitin en ellas. Igual que cruza una línea pasear el retrato de Stalin por Madrid. Se cruzan pero no suena el bip, bip de alarma.
La acusación es especialmente miserable tratándose del partido de Ortega Lara, aunque tiene varias trayectorias además de la vileza. Una, claro, es rascar votos entre lo más profundo del resentimiento social, pues todo es poco ante las elecciones de Madrid. Incluso el mundo liberalio ha dejado de hablar de populismos (Vox=Podemos) para, ¡ahora sí! hacerlo de comunismo («Comunismo o libertad»).
Pero además, al relacionar con el terrorismo a Vox, Iglesias está asociando a ese partido con la violencia y ya sabemos cuál es la ecuación Antifa: violencia para el ‘fascista’, violencia para el violento. Que esto se haga por un partido en el gobierno y desde la televisión pública resulta ligeramente amenazante, además de ser un insulto muy serio a millones de votantes y contribuyentes, palabra, por cierto, desprovista ya de toda dignidad.
Es un insulto a millones de contribuyentes, palabra desprovista ya de toda dignidad