Entre las ganas y la nostalgia
Muchos sevillanos celebran la ilusión del ‘sábado del pescaíto’ con el que arranca esta pseudo ‘Feria’ del Centro de la ciudad
laveles en las mesas, farolillos en ventanas, azoteas y balcones, calles engalanadas —como Miguel Cid—, guitarras, grupos de jóvenes y no tan jóvenes con chaqueta... Muchos sevillanos se aferraron ayer a esta ‘Feria’ del Centro como excusa para rememorar en Sevilla el ‘sábado del pescaíto’ por las principales calles del Centro y de los barrios de la ciudad. Las terrazas permanecían llenas de público, por lo que ayer se convirtió en misión imposible conseguir alguna sin reserva. Algunos bares, como en Pino Montano, ofrecían rebujito+’pescaíto’ por 20 euros y rebujito+jamón, por 12.
Horas antes, en el interior de una cadena de supermercados, obsequiaban con un cubo para el hielo si se compraba un pack de dos botellas de manzanilla y dos latas para hacer el tradicional rebujito. Y es que, como comentaban muchos, «después de dos años, la gente tiene ganas de Feria». Ya desde el mediodía, en la plaza de la Gavidia un grupo de amigos que siempre acudían al tradicional ‘pescaíto’ no dejaron pasar la oportunidad para reunirse y tomar gambas, boquerones, taquitos de merluza... «y la botella de manzanilla en el cubilete que no falte»,
Cdecían. «Nos falta la flor y el coche de caballos» añadía la mesa de mujeres que los acompañaban, «aunque aquí nunca falta el vino y la cerveza».
«Todo reservado»
Al entrar en uno de los bares de esta plaza, el interior ha sido transformado en una caseta con pañoleta, cortinas de encaje y hasta espejos. Paco Palacios, el propietario del negocio de restauración, declaró que ha querido ambientar el local «un poquito porque la gente necesita alegría y seguir la tradición».
Para el empresario, casi todas las mesas pidieron manzanilla, así como los productos típicos de este día. Desde hace una semana tenemos todo reservado para la noche de sábado», afirmaba.
Hasta alguna flamenca y baile por sevillanas encontramos en uno de los veladores de ese punto estratégico de la ciudad que forma la intersección de las calles Almirante Bonifaz, General Polavieja y Albareda, transformado este sábado en simulacro de calle del Real por el ambiente que se respira. Aquí estaremos «hasta el toque de queda», horario de cierre de bares que anoche respetó este ‘sábado de pescaíto’ pero que hoy volverá a adelantar hora al entrar en vigor los nuevos horarios.
Ambiente animado también en las plazas del Salvador y de San Francisco, que desde el viernes iluminaban sus guirnaldas de paños y bombillas. Jóvenes camino de ‘pescaítos’ particulares paseando por la avenida, que estos días luce un centenar de gallardetes que muestran el No8Do y el lema ‘Feria de Abril’. Aquí la melancolía de la Feria nos llega por las flamencas que nos encontramos en las fotografías de los paneles de la exposición ‘Sevilla es primavera’ que lleva por lema ‘Los héroes visten volantes’. Héroes como los taxistas. «Aquí no paramos de trabajar», ironizaba uno de los veinte que aguardaban clientes en la plaza del Duque esperanzados, como todos nosotros, con esa gran ilusión para que pase de una vez esta pandemia y podamos volver a disfrutar de «una Feria como las de antes».