Alertan de una mafia tras varias ocupaciones de un chalé en Gines
Desde febrero lleva dos apropiaciones y un intento más con asalto policial. Los vecinos temen ahora la cuarta
La urbanización La Panadera da nombre no sólo a un conjunto de chalés individuales de una zona exclusiva de Gines, sino al grupo de Whatsapp que han creado los vecinos de la calle Artesa, una de las vías que conforman esta urbanización. Se trata de una treintena de casas de una sola planta con piscinas individuales en una parcela de 400 metros y construidas en el año 2000. Todas ellas habitadas excepto una, el número 5, que ha sido objeto ya de tres ocupaciones en poco más de dos meses. El pasado verano, Gines fue el protagonista de una ocupación que salió en todos los medios de comunicación, junto con otra vivienda de la vecina Espartinas, por un vídeo que grabó la propietaria en el momento de ser apropiada ilegalmente su vivienda. En esta ocasión se trata de un chalé de Gines el que ha sufrido ya tres ocupaciones, bueno, «dos, un intento y una cuarta que estamos esperando», explica uno de sus vecinos a ABC, que prefiere mantenerse en el anonimato.
La segunda se produjo el Sábado de Gloria, un mes después de la primera y la tercera, el 28 de abril, pero en esta ocasión «conseguimos abortarlo rápidamente porque avisamos a la Guardia Civil y a la Policía Local de Gines». La vivienda en cuestión está a la venta en varios portales inmobiliarios y los vecinos denuncian que cada vez que se da una señal por ella, de inmediato vienen a ocuparla, «es algo sistemático, que nos llega a sorprender esta relación». Ahí es donde los vecinos creen que está la clave de tantos intentos de apropiarse e incluso hablan «de una mafia que está detrás de ello». Cuando se meten dentro, hacen una llamada a la Guardia Civil para decirles que lleva ocupada una semana, con lo que ya se considera morada y la policía no puede entrar, «por lo que ya no podemos hacer nada», explica.
Ocurrió con la primera ocupación. «Entonces los vecinos decidimos organizarnos de tal modo de que de allí no saliera ni entrara nadie. La Policía Local llegó e incluso se personó el alcalde de Gines para sacarlos. Se trataba de dos chicas que se pusieron muy nerviosas por la que se estaba montando. De pronto apareció un hombre que habló con los agentes y les dijo que si no las detenían, se las llevaba. Nos dijeron que estaban identificadas e incluso nos amenazaron con mandar a los rumanos y gente de las Tres Mil», detalla este vecino. Entre ocupación y ocupación, comenta que ha venido mucha gente interesándose por el chalé, valorado en 275.000 euros. Se trata de potenciales compradores, «pero cuando hacen una oferta y dan la señal, empieza de nuevo una ocupación, por lo que hemos denunciado esta relación ante la Guardia Civil por si pudiera estar relacionada con algún tipo de mafia. En cuanto al precio, sabemos que están ofertando menos cantidad, unos 250.000 euros, porque el que entre debe hacer algunas obras debido a su estado de abandono, sobre todo en el jardín, donde hay mucha maleza».
Todos a una
La segunda ocupación fue antes de Semana Santa, cuando llegaron «dos personas con pinta de drogadictos, una madre junto con su hija pequeña y otra mujer embarazada, para dar pena, pero de inmediato llamamos a la Guardia Civil y a la Policía Local que los llegaron a detener tras asaltar el chalé con la ayuda de los vecinos. El juicio está fijado para el 1 de julio». El tercero se quedó sólo en intento de ocupación. Fue hace unos días, el 28 de abril. «Avisamos rápidamente y más rápido llegaron los policías y conseguimos abortarlo. Parece que les hemos reventado el negocio a esta mafia, pero estamos esperando una cuarta porque acabamos de conocer que el chalé se ha vendido otra vez», asegura este representante vecinal que dice que si bien la ayuda de la Policía Local ha sido plena y rápida desde el inicio, no ha sido así con la Guardia Civil.
Tras la primera intervención tuvimos que poner una queja ante la Subdelegación del Gobierno en Sevilla porque en la primera la labor no fue del todo correcta, al no atender la llamada, pero ya no es así y existe una estrecha relación entres estos dos cuerpos, el Ayuntamiento y nosotros los vecinos». Ahora, el grupo de Whatsapp está más operativo puesto que, de seguir su teoría, tras una nueva señal intentarán la que sería la cuarta ocupación. Se trata de un problema generalizado en la provincia que desde 2018 ha registrado más de dos mil ocupaciones ilegales de inmuebles, de las que tan sólo 200 han acabado en el juzgado.