La Diputación restaura el noviciado de San Luis para exponer su patrimonio
Con las próximas obras en la sala De Profundis, la planta baja estará lista para acoger la muestra sobre la historia del viejo complejo jesuita
El esplendor barroco de San Luis de los Franceses volvió a lucir en 2017, tras la gran restauración que se practicó en la iglesia, la cripta y la capilla Doméstica, los tres espacios principales de este complejo que construyeron los jesuitas en el siglo XVIII y que quedó desacralizado en el siglo XIX tras la definitiva expulsión de la Compañía. Sin embargo, dada la envergadura del edificio, aún quedaba pendiente la recuperación de los más de 5.000 metros cuadrados del antiguo noviciado —situado anexo a la iglesia—, donde la Diputación de Sevilla proyecta ubicar el futuro Museo Provincial. Estas obras de restauración empezaron en 2019 con el refectorio del convento, que ya están terminadas a falta de la climatización del espacio. Ésta será una de las salas de exposición del futuro museo. Otra de ellas será el espacio conocido como ‘De Profundis’, donde se realizaban los velatorios a los jesuitas, y cuyo proyecto de rehabilitación está en proceso de licitación.
El objetivo de la Diputación, una vez estén concluidas estas obras, es ofertar al público una visita integral del complejo monumental, con las dependencias principales —iglesia, capilla
Doméstica y cripta— y con las dos salas expositivas, en las que se va a contar la historia de San Luis de los Franceses. En el refectorio se mostrarán la pintura y la escultura, mientras que en la sala De Profundis se colocarán unas vitrinas expositivas con documentos y la obra suntuaria. Todo esto estará contextualizado en la cronología de este espacio, que fue centro asistencial volcado en labor hospitalaria en el sentido etimológico del término: hospitalidad, asilo y asistencia para niños y ancianos, y no en el sentido sanitario. Esa es la razón por la que no fue asaltado, quemado, ni dañado en ningún momento de su historia, a pesar de las vicisitudes diferentes por las que pasó el barrio y la ciudad. Y es por ese motivo por el que, al desaparecer las juntas de beneficencia, este tipo de instalaciones hospitalarias las heredaron las diputaciones, que asumieron ese papel asistencial que se dispensaba en dichos centros.
Un patrimonio almacenado
La Diputación tiene un enorme patrimonio histórico-artístico que, en gran parte, se encuentra almacenado en cajas a la espera de que se pueda exponer en este museo que irá creciendo conforme se vaya restaurando el noviciado. El proyecto contempla la muestra de ese fondo patrimonial que la Diputación tiene como consecuencia de asumir la labor hospitalaria de estos centros en estas dos salas ubicadas en la primera planta del complejo. Mediante paneles explicativos, folletos y una selección de obras y documentos originales, el visitante podrá completar una ‘visita de los sentidos’, en la que disfrutará del sueño barroco que construyeron los jesuitas en las estancias principales, así como con la visita museística que enmarcará históricamente este espacio.
El primer paso para acoger esta primera parte del museo es la rehabilitación de la sala De Profundis. La obra seguirá la misma hoja de ruta que la utilizada con el refectorio en 2019. Sin embargo, al tener una altura más re