«Guido es un jugador científico, cada partido es un laboratorio para él»
Giber Becerra, que tuvo al argentino en Xolos y América, elogia el método de trabajo del pivote bético
El crecimiento de Guido Rodríguez en el Betis ha sido una de las grandes noticias en verdiblanco. Se ha hecho no sólo con un puesto indiscutible en la manija del equipo sino que su valoración ha subido como la espuma tras sus notables actuaciones. Fundamental en los planes de Manuel Pellegrini, Guido Rodríguez es uno de los faros de la buena campaña bética, que apunta a puestos europeos. Para conocer las claves de la evolución de Guido habla una de las personas que más cerca ha trabajado con él. Se trata de Giber Becerra, que se encargaba de la preparación física en Xolos Tijuana y América de México cuando el futbolista heliopolitano militó en esos equipos. «Cuando Guido llegó al Xolos Tijuana estaba el director técnico Miguel Herrera y nosotros en su equipo. Hicimos un análisis de sus pros y deficiencias para maximizar su rendimiento. Pero por fortuna tuvimos la oportunidad de trabajar con Guido en dos etapas, tanto en Xolos como en América, y eso nos dio la oportunidad de desarrollar un proceso. Es un jugador que tiene mucho talento, con el que trabajamos la fortaleza y la potencia. Guido es un gran profesional. En las entrevistas siempre me preguntan por jugadores ejemplares que he tenido y siempre saco el nombre de Guido Rodríguez. Porque es un deportista muy consciente, se cuida. El éxito y el rendimiento no son casualidad, son causalidad. Es fruto de su trabajo consciente, centrado en lo que él quiere mejorar. Y Guido siempre tira a lo grande. En Tijuana le preguntamos a dónde quería ir, cuáles eran sus metas. Hay muchos jugadores que no tienen claros sus objetivos, que no tienen clara esa visión de pensar en grande. El éxito viene siempre por la relación del físico y lo mental», señala inicialmente Giber Becerra.
Y define cómo vive el día a día el futbolista argentino, con un método claro de análisis de su propio rendimiento. «Guido es meticuloso con todo lo que hace en el partido y se da cuenta de lo que sucede porque lo calibra todo.