Público limitado para el filial
Hasta 400 invitados, familiares y canteranos podrán ver mañana in situ al Sevilla Atlético
PCada día que pasa es un día menos para volver a ver abiertas de par en par las puertas del estadio Ramón SánchezPizjuán. La esperanza de la vacuna es ya una certeza irreductible, y en ese compás de espera de los aficionados que quieren regresar a Nervión a falta de cuatro partidos para que se cierre LaLiga Santander, se ha abierto una opción diferente para algunos sevillistas de cara a la final del Sevilla Atlético de mañana (12.00/ y es que se abran las puertas de la ciudad deportiva José Ramón Cisneros Palacios para apoyar al segundo equipo sevillista. Concretamente, las del estadio Jesús Navas. Ayer mismo lo hizo oficial el club a través de un comunicado tras la noticia adelantada por
Mañana se disputa el último partido del conjunto franjirrojo de la temporada, que depende de sí mismo para poder sellar su clasificación a Primera RFEF, y podría hacerlo ante la Balompédica Linense, ya clasificada. En esa tesitura, y con el contexto del fin del estado de alarma, el Sevilla va a permitir que un público limitado pueda ocupar las gradas del segundo estadio nervionense. Se ha puesto en marcha un operativo que permitirá ese aforo acotado y selec
OCAS veces va a encontrarse el Sevilla con un Real Madrid tan cascado como mañana en Valdebebas. Debilitado por las lesiones actuales o recientes de varios jugadores, depresivo por su eliminación en las semifinales de la Champions, estresado por su falta de gol, incómodo por ir a remolque de su eterno, el de la colchonería. Pocas veces van a tener los de Zidane enfrente un Sevilla tan compacto, tan seguro de sí mismo, tan poco especulativo. Queda la duda de si en la balanza de la motivación, el platillo local, con el título liguero aún a su alcance, soportará más peso que el de un visitante al que la derrota contra el Athletic despertó de un sueño precioso.
No entendería la afición sevillista, por mucho que los fracasos his
FRANCISCO PÉREZ cionado basado en invitaciones para que los propios jugadores del filial y otras personas relacionadas con su entorno, tales como sus representantes o proveedores, entre otro personal de cantera, puedan acudir a la gran final de mañana y el Sevilla Atlético. En concreto, el club trabaja en la logística de dar cobijo hasta a 400 personas, que serán las que apoyarán presencialmente en el segundo estadio sevillista, contando además con jugadores procedentes de otros escalafones inferiores para que, si el equipo de Paco Gallardo venciera a la Balona, la carretera «FINAL» tóricos anestesien el ansia de victoria cuando se rinde visita a la capital, que el equipo compareciese mañana en el obrador del merengue como si la temporada ya hubiera acabado para él, como si fuera a mostrarle a los de Zidane las chanclas tan monas compradas para las vacaciones. Hay nuevos objetivos por los que luchar, más allá del orgullo de Nervión: unos, factibles, como la participación en la Supercopa; otros, complicados, como el de un subcampeonato que no se festeja desde hace 64 años; algunos, necesarios, como el de ir sembrando en la conciencia de los rivales que se llegó como posde Utrera se convierta en una fiesta contenida de la cantera nervionense, con muchos de sus implicados celebrando el pase en el propio estadio, santo y seña del futuro blanquirrojo.
En ese mismo sentido, este medio ha podido conocer que serán hasta tres invitaciones con las que contará cada futbolista del Sevilla Atlético para que los familiares directos puedan acudir a animar a los suyos, ya que no han podido estar cerca de ellos durante toda la temporada, aunque finalmente los abonados del club no podrán entrar en el estadio que lleva el nombre de la leyenda sevillista para el partido de mañana. La normalidad se acerca poco a poco a las gradas sevillistas.
Los de Gallardo dependen de sí mismos ante la Balompédica Linense
No entendería la afición sevillista que el equipo compareciese mañana en el obrador del merengue como si la temporada ya hubiera acabado para él
tulante al título para quedarse y no como flor de pandemia.
Está por ver si los grandes señalados por la derrota ante el Chelsea repiten titularidad con Zidane. El precario estado físico de Sergio Ramos lastró a la defensa y las risas de Hazard al concluir el choque hirieron a un madridismo que espera del belga más fútbol y respeto. También hay curiosidad por saber lo que le dice Pérez a Castro a cuenta de la Superliga, tras iniciar el sevillista un idilio con Aleksander Ceferin, el diablo que se viste de Zara para los madridistas. De mercadillo lo hacen para el sevillismo Martínez y González, la broma que Velasco Carballo gasta a Monchi. El que anuló la pasada campaña el gol a De Jong y, en el VAR, el árbitro con el que menos partidos ganó el Sevilla en los últimos 12 años. Gran reserva el tipo.