Un menor distribuía vídeos de alto contenido sexual en Cádiz
Ocho detenidos en la provincia por comercializar pornografía infantil
Los delitos cometidos a través de internet contra menores de edad sigue siendo una de las principales amenazas a las que se enfrentan los niños de la nueva era tecnológica. Delitos que van en aumento y que ponen en peligro no solo su integridad moral sino, a menudo, también su integridad física y psicológica.
De ahí que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado hagan un especial y permanente esfuerzo para identificar y detener a todos aquellos que tras la pantalla de un ordenador o móvil rebasan límites que son ilícitos e inconcebibles.
Y así ha ocurrido en la provincia donde en los últimos meses la Policía Nacional ha detenido hasta a ocho individuos (todos ellos varones) por almacenar y distribuir por diferentes canales vídeos sexuales de niños. Los arrestos se han producido en Jerez, Cádiz, Chiclana, El Gastor y Puerto Real, entre otros municipios. Y entre estas detenciones se investiga a un menor de edad, un chico de 17 años que también captaba estas imágenes para hacer uso pedófilo de ellas. Según ha podido saber este periódico todos ellos adquirían este material por diversas fuentes de la red y posteriormente lo compartían por medio de otros canales.
La investigación ha sido desarrollada por el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría Provincial. Las pesquisas partieron de la propia información de rastreo que manejan estos agentes y también tras la alerta de fuerzas policiales de otros países que localizaban a algunos de estos presuntos delincuentes en Cádiz. Una vez informados y tras complicadas gestiones pudieron identificarlos y fueron a por ellos. En el registro de sus viviendas, tras obtener la autorización judicial, encontraron numerosos archivos pornográficos en sus ordenadores y otros dispositivos. Todo este material será analizado para
Los archivos pedófilos se distribuían a través de P2P sin pasar por servidores, lo que dificulta su localización
determinar si estaban en posesión de más fotos o vídeos y si tienen alguna vinculación con alguna red pedófila, ya que algunos usaban software de intercambio de archivos P2P, (red de nodos en la que todos los ordenadores funcionan como iguales), lo que dificulta aún más la localización de estas imágenes. Otros usaban redes como Facebook o Instagram para compartir los archivos.
El perfil de los investigados es diverso con edades comprendidas entre los 60 y los 17 años. Todos son varones y en el caso de dos de ellos tienen antecedentes por delitos similares.
Menores extranjeros
La crudeza de algunas de las imágenes que tenían ha sobrecogido a los agentes de Delitos Tecnológicos ya que en ellas se pueden ver a niños de apenas seis o menos años realizando actos sexuales. La procedencia de estos menores es extranjera por lo que no se descarta que hayan sido captados por alguna mafia dedicada a la explotación infantil para este tipo de contenidos pedófilos y su posterior comercialización.
Desde la Policía Nacional se alerta del riesgo que corren los menores de edad en el uso de los ordenadores y en internet cuando no se controla lo que ven o comparten. Muchos de estos delincuentes les engañan y luego utilizan las imágenes que les envían para chantajearlos y lograr sus objetivos.
«Hay que tener mucho cuidado, es más habitual de lo que parece», advierten desde el Grupo de Delitos Tecnológicos. «La culpa no es solo de quien sube una imagen sino también de quien la comparte. Todos contribuyen a que el negocio de estas mafias pedófilas sea rentable».