Crece el consumo ecológico, pero lo hace poco
La semana pasada profundizamos en la relevancia del sector ecológico en función de la superficie ocupada y del número de explotaciones, pero dejamos pendiente un aspecto clave como es el consumo. De acuerdo con el informe anual sobre la producción y el consumo ecológico en España elaborado por Ecovalia, la media de consumo de productos ecológicos subió en España por encima del 3% en el último año.
En total, rondaron los 2.850 millones de euros, de los que solo el 12% fue restauración, frente al 88% doméstico. A pesar de ser España uno de los grandes productores, tal como apuntábamos la pasada semana, en consumo solo representamos el 2% del mercado mundial.
Esto supone que el ciudadano español solo gasta de media 53 euros al año en este tipo de alimentos, muy alejados de los 425 de los suizos, e incluso por debajo de los 83 de los noruegos, que se sitúan en décima posición. Llama la atención que ocho de los diez mayores consumidores per cápita mundiales son europeos, y solo Estados Unidos y Canadá se sitúan dentro de este selecto grupo, pero en la séptima y octava posición respectivamente.
Sobre las preferencias del consumidor, el 64% son productos de origen vegetal, un 27% carne y el 9% restante otros productos de origen animal. Una diferencia en la que probablemente influya que hay más proporción de consumidores vegetarianos o veganos que optan por un consumo regular de productos ecológicos, frente a los que mantienen una dieta omnívora. También puede influir que el precio medio de un alimento ecológico vegetal es de 2,5€/kg, bastante menos que los 6,5€/kg en el caso de que sea animal. De todas maneras, uno de los mayores limitantes para la compra de estos productos con respecto a los convencionales es su mayor precio; si bien es cierto que en 2022, con una inflación disparada, los productos ecológicos se han encarecido menos, un 7,3% frente al 8,8% en la cesta convencional.