La víspera: los feriantes cada vez llegan antes
El viernes se ha convertido en una jornada más de la Feria. Sin caballos y con camiones por el real pero con las casetas llenas; Potajes, arroces y recepciones adelantan la fiesta
or muchos debates sobre lo larga que es la Feria y la conveniencia de mantener el formato del inicio el sábado o volver al del lunes, lo de ayer, con casetas llenas en el real, demostró que Sevilla sigue siendo ciudad de vísperas y que a los aficionados a la fiesta, los feriantes, les gusta adelantarse al adelanto. A las cuatro de la tarde en algunas casetas no cabía un alfiler y parecía un día más de Feria. Sin caballos y con camiones de montaje aún en algunas casetas.
La costumbre de poner fin al montaje con un guiso para anticiparse al inicio de la fiesta se ha convertido en habitual. Y ayer en muchas casetas había arroces y guisos. Es el caso del potaje que hace cada año Miguel Gallego y que ya se ha convertido en un clásico desde que lo instaurara en 1993 tras el final de la exhibición de enganches. «Se hacía desde siempre y ya se ha convertido en una tradición. Me gusta dar un potaje», decía el empresario con la caseta llena a reventar.
A Gallego, que recuerda la Feria del Prado a la que acudía de pequeño, le encantaba aquel real que rememora con nostalgia de su infancia. Ayer no paraba de recibir invitados. Estaba el presidente del Parlamento, Jesús Aguirre, el consejero de Presidencia, Antonio Sanz, que tras el paseo por varias casetas partió para inaugurar la Feria de Abril de Barcelona y que aseguraba que iba a pedir «respeto para los andaluces» en Cataluña. También la de Empleo, Rocío Blanco, el candidato del PP, José Luis Sanz, con algunos de los miembros de su lista como Minerva Salas, delegada de Cultura, o Juan Bueno, incansable de la Feria.
En la misma caseta estaba Raquel Revuelta, que se vestirá de flamenca a partir del domingo, la cantante María del Monte junto a su pareja, la periodista Inmaculada Casal. El abogado Francisco Baena Bocanegra, que sigue al pie del cañón, o la viuda de Jaime Ostos, María Ángeles Grajal, Fiona Ferrer y otros rostros conocidos.
Esa no fue la única caseta que ofreció
Precepción. En la de Turismo del Ayuntamiento, el gerente de Contursa, Antonio Jiménez, mostraba orgulloso la caseta que cuenta con una curiosa decoración que mezcla lo clásico y lo moderno. Con buganvillas y trajes de flamenca colgados y un cuadro con inspiración de Sorolla.
Inteligencia artificial
Se trata de una caseta en la que presumían de que Sevilla City Office medirá la satisfacción de los visitantes mediante inteligencia artificial. Se hará mediante unos sensores que no sólo harán un conteo del número de turistas que entran en las casetas sino también mostrarán un gráfico con el porcentaje de satisfacción. «Queremos conocer el perfil del visitante», decía Jiménez que prevé que sea la Feria con mayor ocupación de la última década con una media de ocupación del 90 por ciento. Ya se empieza a notar.
Arriba, José María del Río, Antonio Jiménez, gerente de Contursa, y Ricardo Pichardo en la recepción de la caseta de Sevilla City Office; en el centro, los consejeros de la Junta Rocío Blanco, Antonio Sanz y José Antonio Nieto y el presidente del Parlamento, Jesús Aguirre. Sobre estas líneas la familia Gallego en el tradicional potaje