La sobrexposición de Sánchez convierte el 28M en el primer asalto que busca el PP
▸El presidente toma las riendas con una frenética actividad hasta el cierre de la campaña el 26 de mayo, solo interrumpida por su viaje a EE.UU.
Málaga, Barcelona, Alicante, Murcia, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife entre el miércoles y el domingo de la semana pasada, Castellón hoy mismo, después de la reunión del Consejo de Ministros, y el fin de semana, recién llegado de su visita a Washington –donde celebrará su primera entrevista bilateral con Joe Biden en la Casa Blanca– vuelta a la carga. Sevilla el sábado, Puertollano (Ciudad Real) el domingo, esta vez junto al presidente socialista de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, que se ausentó del último mitin del PSOE en Toledo. Luego un pequeño respiro y desde el día 17 maratón final de campaña, que cerrará en Barcelona, con al menos diez mítines en nueve días.
A Pedro Sánchez le podrán reprochar propios y extraños muchas cosas, pero no falta de presencia y actividad, más como secretario general del PSOE que como presidente del Gobierno, como evidencia el rápido inventario de su ruta. Y desde hace semanas ya. A finales de abril estuvo en Logroño, Pamplona y La Coruña, marcando ya un ritmo de tres o cuatro provincias por semana.
Una frenética actividad por la que incluso muchos en las filas socialistas se muestran sorprendidos en los últimos días, ante lo que consideran una peligrosa sobrexposición de su figura. Una circunstancia a la que hay que añadir los vídeos o ‘performance’ que
LOGROÑO. LA CORUÑA. PAMPLONA. MÁLAGA. BARCELONA. ALICANTE. MURCIA. LAS PALMAS. TENERIFE. CASTELLÓN. SEVILLA. PUERTOLLANO.
27 de abril
28 de abril 29 de abril
2 de mayo
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9 de mayo
13 de mayo
14 de mayo reb como los que se proyectan construir en toda España, en terrenos del Ministerio de Defensa, a imagen y semejanza de lo planteado con el rescate de la Operación Campamento en Madrid. Una proliferación de anuncios que sirvió en bandeja al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, hablar sarcásticamente en el último debate con Sánchez en el Senado –precisamente donde hizo uno de esos anuncios– del «milagro de los panes y los pisos».
Fue precisamente Feijóo quien en una reciente Junta Directiva Nacional del PP, ante los barones regionales del partido, admitió que la cita de las municipales y autonómicas del 28M no era a priori tan difícil para el PSOE como las elecciones generales de final de año, en la que ambos pujarán por pernoctar en La Moncloa. El aserto fue tomado enseguida por los socialistas y su órbita como un síntoma de debilidad. Incluso Sánchez, el pasado 21 de abril en Toledo, habló con sorna de que «la derecha parece que tiene dudas» y se reafirmó ante los suyos diciendo que «nosotros no tenemos ninguna, salimos a ganar». Feijóo había