Sevilla no tiene ni uno de los puntos de recarga prometidos para 2023
▸El contrato para instalar 350 estaciones de acceso público de la capital no ha completado aún la fase de análisis ▸El Ayuntamiento anunció que estarían listos en la primera mitad del año, pero no hay habilitado ningún poste
Aunque este jueves arranca oficialmente la campaña electoral, hace semanas que los partidos se han puesto en modo propaganda y todos los días se anuncia un nuevo proyecto, reforma o mejora para el votante al que se pretende captar. Pero el universo de la promesa política en muchas ocasiones no coincide con los tiempos reales y es cuando se producen los incumplimientos a los que el ciudadano se ha terminado acostumbrando. Así está ocurriendo con la anunciada primera red pública de puntos de recarga para coches eléctricos en la capital hispalense. Una apuesta municipal por la sostenibilidad, ese concepto tan recurrente en los discursos de campaña, que no está yendo a la velocidad anunciada.
En junio del año pasado se anunciaba la licitación del primer gran contrato para la instalación de 350 estaciones (postes), que entre todos suman 700 puntos de recarga, y en noviembre se adjudicaba la explotación del servicio a cuatro empresas: Cable Energía S.L. (Shell), Eranovum E Mobility, Wenea Urban y Endesa X Way. ABC publicaba a principios de diciembre el mapa con las ubicaciones de las estaciones que según el anuncio municipal se van repartir por todos los distritos de la ciudad, dejando fuera las zonas monumentales donde el tráfico rodado está vetado y carece de sentido una instalación de este tipo.
En diciembre, con el primer mapa ya definido, el Ayuntamiento explicó que empezaría la instalación durante la Navidad para que los primeros postes entraran en funcionamiento en los primeros meses del presente año. Sin embargo, ya estamos a mediados de mayo y no hay ninguna estación operativa. Fuentes de Endesa, que es una de las empresas adjudicatarias del servicio, han confirmado a este periódico que se está aún en fase de tramitación con Urbanismo para comprobar que las ubicaciones seleccionadas inicialmente son viables. Este trabajo se está haciendo punto por punto para comprobar, entre otros elementos, que la red eléctrica puede soportar la incorporación de estaciones con dos puntos de recarga cada una y que están concebidas para que puedan dar servicio las 24 horas al día.
Sólo el 18% autorizado
El Consistorio, a preguntas de este periódico, ha explicado que «a día de hoy, se han analizado ya tres distritos más la zona de la Cartuja y, conforme a la capacidad de Endesa Distribución», se han autorizado: 15 puntos dobles (Bellavista-La Palmera), 18 puntos dobles (Cerro-Amate), 17 puntos dobles (Nervión) y 11 en La Cartuja. En total 61 estaciones (la mayoría son de carga semirrápida y ultrarrápida) de las 350 que forman parte del contrato. Quedan apenas unas semanas para alcanzar el ecuador del año y no se ha autorizado la instalación ni del 18% de las estaciones comprometidas. Además, la mayoría de los distritos aún no han sido analizados, quedándose fuera de esa primera tanda zonas con alta densidad de tráfico como la Macarena o Este.
Las cifras actualizadas que ha aportado el Ayuntamiento señalan que se han analizado en total 108 postes, pero actualmente sólo están aprobados 61. Es decir, que las otras 47 estaciones deben ser reubicadas. «Una vez que Endesa Distribución ha determinado la viabilidad, las empresas adjudicatarias pueden solicitar los premisos de obras a Urbanismo para instalarlos y la posterior conexión a Endesa», señalan desde el Consistorio. Por tanto y atendiendo al estado de tramitación del contrato, parece imposible que puedan entrar en funcionamiento las 350 estaciones en la primera mitad del año, tal y como se prometió. En total se ha adjudicado la explotación de 35 cargadores ultrarrápidos (350 kw), 40 cargadores rápidos (100kw) y 175 semirrápidos (mínimo de 44kw). Los primeros pueden llegar a cargar los vehículos en menos de 30 minutos; los segundos requieren una hora de media y los últimos, que son los más habituales, necesitan de más de 60 minutos. En estos cálculos también influye el modelo de vehículo y las características de las baterías.
Las electrolineras son obligatorias en los aparcamientos de los edificios de oficinas públicos y privados, centros deportivos, hospitales y otras sedes que dispongan más de 20 plazas de aparcamiento, según un Real Decreto aprobado el año pasado por el Gobierno central y que entró en vigor el 1 de enero. Una normativa que va en concordancia con una directiva europea que indica a los países miembros la necesidad de acelerar la llamada movilidad sostenible. Esto obligó a grandes superficies y a administraciones públicas como la Junta a instalar estaciones de recarga en bolsas de aparcamiento de consejerías o de los hospitales.
La red de estaciones adjudicada por el Ayuntamiento persigue incentivar el uso del vehículo eléctrico en la capital,