La era dorada del Barça pierde a su último vestigio
▸ Clave en los éxitos del club durante los últimos 15 años aunque siempre a la sombra de grandes estrellas, Busquets oficializa su adiós a final de temporada
Era un secreto a voces, pero Sergio Busquets (34) se encargó de oficializarlo tras el entrenamiento de ayer: no seguirá en el Barcelona a partir del 30 de junio. El capitán, último bastión que quedaba en el Camp Nou de la generación dorada que firmó los mejores años de la historia del club, vaciará su taquilla a final de temporada. Cierre a tres lustros en los que ha formado parte de uno de los mejores centros del campo del mundo junto a Xavi e Iniesta, en los que ha abarrotado el museo azulgrana de trofeos nacionales e internacionales y en los que ha dado a España la única estrella mundialista que luce (Sudáfrica 2010). El catalán, sin embargo, no cuelga las botas.
Aquel niño que acompañaba a su padre, Carlos Busquets, portero del primer equipo del Barça, a los entrenamientos en los campos anexos al Camp Nou, terminó relegando a su progenitor a un segundo plano y se convirtió en una de las figuras más importantes de la historia reciente del club. El último superviviente en el vestuario de aquella plantilla que tocó el cielo conquistando el sextete en 2009.
Descarta renovar
Alejado del divismo mediático de las estrellas y con perfil bajo en su vida privada, a Busquets siempre le ha gustado pasar desapercibido junto a su mujer, Elena, y sus hijos Enzo y Levi. La familia por delante de todo, como cuando en Badía del Vallés, su pueblo, decidieron bautizar el campo municipal con su nombre como reconocimiento tras ganar el Mundial. Exigió que la instalación llevara también el apellido materno: Campo Municipal Sergio Busquets Burgos.
«Ha llegado el momento de anunciar que esta será mi última temporada en el Barça. Ha sido un camino inolvidable. Desde pequeño, cuando venía a ver los partidos o los veía por la tele, siempre soñaba con poder jugar con esta camiseta y en este estadio. Pero la realidad ha superado todo lo que pude soñar. Ha sido un honor, un sueño, un orgullo. Lo ha sido todo poder defender y representar este escudo tantos años, pero todo tiene un inicio y un final», anunció tras el entrenamiento matinal. Antes se lo había comunicado ya a todos sus compañeros, a Xavi y al presidente Joan Laporta. Aunque el técnico le insistió para que renovara y le garantizó minutos, el centrocampista ha preferido marcharse por la puerta grande. Lo hará, salvo debacle, levantando la Liga como capitán, el que será su título 32 como azulgrana. La oferta a la baja que le había hecho el Barcelona, cobrando un 30 por ciento de lo que percibía este año, tampoco parecía una invitación para que firmara la renovación. A sus 34 años es consciente que le quedan pocas temporadas como profesional y hay lugares en los que puede retirarse cobrando muchísimo más dinero y sin la presión competitiva que supone ju