El Gobierno ‘vende’ para Doñana obras pendientes por las que fue multado El trasvase que se aprobó en 2018 aún está sin hacer
▸Aprueba llevar agua superficial a Matalascañas, que sigue sin depuradora y paga por ello una sanción millonaria ▸Ribera anuncia otro trasvase desde el Tinto, Odiel y Piedras, una demarcación que no gestiona el Estado sino la Junta
Con todos los focos puestos sobre los regadíos cercanos al espacio protegido de Doñana y a tan sólo unas horas del comienzo de la campaña electoral, el Gobierno anunció una obra para reducir la presión del acuífero que nutre al parque nacional. La sobreexplotación del acuífero se debe en gran parte a la falta de una estación depuradora en el núcleo turístico de Matalascañas, que el Gobierno tiene pendiente de ejecutar desde 1993 y por cuyo incumplimiento fue condenado a pagar una multa millonaria a la Unión Europea en julio de 2018.
Dentro de un paquete más amplio de medidas para paliar, en parte, la sequía del campo español, aprobado contra reloj en un Consejo de Ministros extraordinario, la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, aseguró que ha aprobado la sustitución de los bombeos de agua subterránea que abastecen a Ma
En diciembre de 2018, el Gobierno de Pedro Sánchez aprobó el trasvase de 19,99 hectómetros cúbicos desde la cuenca de los ríos Odiel, Tinto y Piedras hasta la zona de Doñana. Cinco años después, la obras para acometer el desembalse y aliviar así el acuífero no se han realizado. El Gobierno no adjudicó hasta el pasado mes de febrero las obras para duplicar la capacidad del túnel de San Silvestre, imprescindible para llevar agua hasta los regadíos ‘legales’. No estarán terminadas antes de 2026. Las obras de la presa de Alcolea, necesarias para los regadíos, están paralizadas desde 2016 y sin fecha de reanudación. talascañas por aguas superficiales de la estación potabilizadora de Palos y un trasvase de 3 hectómetros cúbicos anuales de la cuenca de los ríos Tinto y Odiel.
En lo que respecta a este nuevo trasvase, fuentes del Gobierno andaluz indicaron a ABC que está previsto en el Plan Hidrológico del Tinto, Odiel y Piedras para el período 2022-2027, cuyo documento definitivo todavía no está aprobado. Pero lo que más ha llamado la atención de la Administración autonómica es que el Ejecutivo central ‘venda’ como propia una actuación en una cuenca que es de competencia autonómica y no estatal.
En cuanto a Matalascañas, la sustitución del agua subterránea por superficial tampoco es un proyecto nuevo. Aparece en el Marco de Actuaciones para Doñana, un documento que la ministra presentó en Almonte el pasado mes de noviembre. Ahora figura en el nuevo decreto que recoge actuaciones prioritarias en las cuencas más castigadas para mejorar los recursos hídricos. El documento marco de Doñana ya contemplaba el citado trasvase con el objetivo de dotar al sistema de abastecimiento de Matalascañas de «fuentes alternativas o complementarias de suministro que permitan asegurar el abastecimiento del núcleo urbano limitando primero y eliminando después sus impactos sobre las lagunas de Doñana más próximas».
En el caso del referido trasvase para el abastecimiento –no para regadíos– en el enclave de Matalascañas, que está próximo a Doñana, las urgencias elec