A las urnas con 97 años y «hasta que el cuerpo aguante»
Casi tres décadas lleva José Antonio Torres al frente del Ayuntamiento de Chercos en Almería. Desde que en 1995 se alzó con el puesto no ha cesado en su empeño de trabajar por su pueblo. Seguramente sea el alcalde más viejo de España y el candidato más longevo que con 97 años se vuelve a presentar por las filas del Partido Popular (PP).
En Chercos no hay colegio, mucho menos cine, solo un pequeño consultorio de salud para una población que roza los 300 habitantes y tiene una edad media de 48 años. Una localidad que es víctima de la despoblación que en los últimos años ha recibido con los brazos abiertos a residentes extranjeros, que en su mayor parte británicos.
El presupuesto municipal alcanza los 400.000 euros y la economía de la localidad depende del mármol debido a la cercanía con Macael, donde se ubican las conocidas canteras de la piedra natural. Llegar a Chercos no es tarea fácil. Hay que recorrer una carretera sinuosa que aísla aún más a los vecinos de este pueblo del Valle del Almanzora.
José Antonio desempeñó su labor como agente de la Guardia Civil hasta su jubilación. No cobra sueldo ni dietas.
Acaba ahora su séptima legislatura y se enfrenta a un nuevo panorama político en su municipio. Uno de sus concejales renunció al acta para liderar su propia candidatura y casualmente es su sobrino. A pesar de las circunstancias, Torres se presenta por amor a su pueblo. Con una gran vocación de servicio público, no teme a su avanzada edad. «Hasta que el cuerpo aguante», dice que seguirá su camino en la Alcaldía.
Además de la candidatura del PP de José Antonio se presentan PSOE, Vox, Ciudadanos y el partido de Independientes por Chercos. En las elecciones municipales de 2019, Torres obtuvo la mayoría absoluta con cuatro de los siete concejales. Más del 90% de la población acudió a las urnas, aquí un voto puede cambiarlo todo. Desde la oposición, los socialistas defienden que Chercos necesita un cambio de rumbo que «saque al pueblo de la situación de pesimismo en la que se encuentra». El candidato del PSOE a la Alcaldía de la localidad, Eduardo Mena, afea al equipo de Torres que tenga al municipio «absolutamente abandonado porque su proyecto está acabado».
Chercos, cuyo nombre procede del vocablo mozárabe ‘Yerku’, significa encina. Un destino del interior de la provincia en el que el tiempo parece haberse detenido. El pueblo está dividido entre Chercos Nuevo y Chercos Viejo, ya que el municipio cambió su ubicación para estar mejor comunicado. Las calles del antiguo núcleo fueron restauradas, pero la mayoría de viviendas están abandonadas. Permanece la antigua iglesia en un entorno de calzadas empinadas con fachadas encaladas que ven pasar el tiempo entre los cerros de pizarra de la Sierra de Los Filabres.