Sevilla Este, el barrio clave para gobernar el Ayuntamiento
▸Con más de 100.000 habitantes de perfil moderado, es la plaza donde más se han volcado Muñoz y Sanz en campaña ▸Tiene grandes carencias de movilidad y han visto cómo se priorizaba el metro a Pino Montano y le vendían un tranvibús
Sevilla Este se ha convertido en la pieza más codiciada del tablero del 28-M. Con 106.487 habitantes, es el barrio más poblado de la capital —representa el 15,3 por ciento de la población total—, el que más crece (más de 1.000 en el último censo) y, probablemente, el que más carencias tenga en cuanto a infraestructuras de movilidad. Por eso, desde hace meses los candidatos Antonio Muñoz (PSOE) y José Luis Sanz (PP) se han placeado por allí de forma constante y han incluido un capítulo específico de promesas en sus programas electorales para intentar captar un voto que para nada se decanta por un color político específico.
Tiene unas características socioeconómicas que son fundamentales para comprender el movimiento pendular del sufragio, que es muy moderado, al contrario de lo que ocurre con los otros dos barrios del distrito, Alcosa y Torreblanca, que son feudos históricamente socialistas. En Sevilla Este, como ocurre con Los Bermejales, se han marchado a vivir en los últimos años numerosas familias con niños de un nivel económico medio-alto.
Si se analiza la radiografía de cómo votó el distrito en las municipales de 2019 se entiende que la batalla electoral, ahora, está precisamente aquí. Hubo una alta abstención (43,18%) y ganó el PSOE de forma abrumadora (45% de los votos), seguido por Adelante (15,62%), que se concentran casi mayoritariamente en Alcosa y Torreblanca. El batacazo electoral del PP en 2019 se notó especialmente en Sevilla Este, donde hubo el mismo porcentaje de votos hacia el PP que hacia Ciudadanos (un 14%), y sólo un 7% votó a Vox.
La lectura que hacen los partidos estas semanas, teniendo en cuenta la absorción del votante de Cs por parte del PP y sacando del tablero a los dos feudos tradicionales del PSOE, es que el empate técnico que dan las encuestas en estos días se puede resolver en Sevilla Este y otros barrios de características similares como Los Bermejales, aunque con menor número de habitantes.
Los propios vecinos se han llegado a movilizar por las carencias en sus conexiones con el Centro, donde apenas tienen la línea 27 de Tussam, que tarda una hora en llegar al Duque en hora punta y, a veces, el autobús no para porque ya va lleno en el Palacio de Congresos. Esta zona, pese a ser la más grande y la que más crece, ha visto cómo se posponía la línea 2 de metro —que tiene proyectada allí su origen— para priorizar la 3, por decisión política, para darle cobertura a los vecinos de Pino Montano.
Se quejan también de la ausencia de instalaciones deportivas del IMD, de la limpieza de las calles y la falta de mantenimiento del acerado. El centro de salud María Fuensanta Pérez Quirós —que depende de la Junta— está saturado y según los vecinos y, para colmo, pese a su cercanía con el aeropuerto, no tiene conexión porque el autobús no pasa por allí. Encima, paradójicamente, si van en taxi tienen que pagar los 25 euros de tarifa única que también pagan los de Bellavista, que están en el extremo opuesto. Toda esta zona tiene un enorme déficit de aparcamientos y pese a las carencias se está encareciendo y un estudio supera ya ampliamente los 600 euros de renta.
Por todo ello, Sanz y Muñoz se han volcado con una batería de promesas electorales con el intento de vincular
PP y PSOE prometen reurbanizaciones, bibliotecas, parkings y un distrito propio separado de Torreblanca y Alcosa