ABC (Sevilla)

Jesús Navas, cronología del más puro sentido del compromiso

▸El lateral palaciego ya piensa en batir este miércoles al Elche tras alcanzar los 650 partidos como sevillista ▸De jugar en el Martínez Valero, Navas igualará su máxima marca de duelos desde que regresó a Nervión en 2017 Jordán, con pocas opciones de vol

- IGNACIO LIAÑO

Tuvo la posibilida­d de descansar ayer, porque los tocados y titulares tienen siempre la opción de pasar y recuperar por la chapa y pintura que ofrecen los readaptado­res del club, pero la noticia está en que Jesús Navas no está dispuesto a perderse ni una sola sesión de los entrenamie­ntos que ya han arrancado pensando en Elche. La grave entrada de Miranda fue la gran comidilla en la ciudad deportiva sevillista en el regreso a los entrenamie­ntos que ya plantea José Luis Mendilibar, pero lo cierto es que el asunto está más que zanjado por parte de quien fue clara víctima de un lance que pudo poner en peligro su integridad física.

Navas aceptó el perdón de Miranda porque si no, no sería Navas, sería otro jugador. Eso es justo lo que piensan en la entidad de Nervión, a la que se le heló la sangre al igual que a sus aficionado­s cuando vio que el mayor emblema de la historia contemporá­nea del club pudo haber dicho adiós a la temporada en la acción más comentada del derbi. La impotencia que le dio saber que pudo salir en camilla le hizo reaccionar tal y como lo hizo Navas, frenado por dos colosos como son Bono y Dmitrovic, y también por un pacificado­r Joaquín que fue quien representó el perdón público del beticismo. La paz iba por leyendas.

Se recompuso Navas tras el fuerte dolor acuciante de su espinilla, y ya en el vestuario local y con los humos más templados, recibió la visita de un arrepentid­o Miranda. Fue Rakitic quien lo reveló en la zona mixta del estadio. Pese a la creciente indignació­n del SánchezPiz­juán en ese final tan agridulce, en el Sevilla están por la labor de bajar cualquier balón de la discordia al suelo y lo achacan a una acción que puede verse, aunque no merezca ninguna costumbre, eventualme­nte en un terreno de juego. Y más un enfrentami­ento de tal rivalidad. El presidente sevillista, José

Castro, fue el primero que quiso quitarle hierro al asunto. afirmando que son cosas que pasan en el fútbol, con la intención de querer pasar página cuanto antes.

Al igual que el resto de sus compañeros, Navas ya atiende al corto horizonte de este miércoles en el que podría regresar al once inicial en el estadio Martínez Valero ante un conjunto ya descendido como es el ilicitano. En el derbi tuvo Montiel una buena cuota de protagonis­mo a nivel defensivo para mantener a raya su zona trasera, a tenor del poco caudal ofensivo mostrado por los de Pellegrini, y en el minuto 82 la leyenda de Los Palacios relevó al campeón del mundo con Argentina. Pocos minutos antes de que se produjese la fatídica jugada que le deja una herida a Navas que ahora hereda como parte de cualquier batalla.

Porque el lateral sevillano, a sus 37 años, mira con ambición la posibilida­d de igualar su marca de 47 partidos firmados en la temporada 2019-20, el curso con mayos concursos de Navas desde su regreso a Nervión tras volver del Manchester City. Con lo cual esta circunstan­cia particular de ser daño colateral de un derbi coincide con la mejor prueba de compromiso del capitán sevillista. Porque con la cita del domingo

Arrancó la semana de trabajo para el Sevilla de Mendilibar tras la primera sesión orientada a la recuperaci­ón de los titulares en la que sólo saltaron al césped de la ciudad deportiva Jesús Navas, En-Nesyri, Badé, Fernando, Ocampos, Tecatito, Bryan Gil y Suso, además de varios canteranos del filial sevillista, ya sin liga. Y fue noticia la presencia de Joan Jordán, a quien se le vio haciendo al margen actividade­s destinadas a seguir mejorando ya en la fase final de su lesión. El centrocamp­ista se sigue recuperand­o de su lesión en el talón de Aquiles, pero tiene difícil reaparecer antes de que el Sevilla se marche de vacaciones. Los duelos de Elche el miércoles, del sábado con el Real Madrid y el siguiente miércoles con la final de Budapest, últimas citas antes de que el conjunto nervionens­e despida el campeonato liguero ante la Real Sociedad el 4 de junio a las 19.00.

Navas alcanza los 650 partidos oficiales con el Sevilla. Nadie se acerca siquiera a la magnitud de semejante número, porque Pablo Blanco, que fue precisamen­te quien lo descubrió en aquel Los Palacios-Diablos Rojos, quizá el partido amateur más importante de la historia del Sevilla, suma un total de 415 choques.

Un dato que ya rebasó la humilde estrella palaciega en 2017. Un Navas que va más allá incluso del nombre y apellido que ilustra al estadio donde todo crece en la carretera de Utrera, el recinto donde aprenden a competir el Sevilla Atlético y el Sevilla Femenino, fiable testigo diario del irreprocha­ble sentido del deber de quien luce el brazalete que incumbe a todos los que poblan el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán vestidos de blanco y rojo.

Cita con su historia Navas sueña con la final de Budapest, que podría honrarle con alzar, capitán, otra Europa League tal y como lo hizo en Colonia

El dato no engaña

Los números de Navas en su segunda etapa como sevillista pueden seguir aumentando, teniendo en cuenta que aún restan cuatro partidos para el cierre de una temporada que puede volver a verlo campeón y ser él mismo quien encumbre esa nueva ilusión. Ya levantó con Lopetegui, y en Colonia, la última dama de plata que restalla en las entretelas de Nervión. Y ha sabido seguir ofreciendo el sevillano un gran nivel competitiv­o tanto con el mencionado técnico vasco como con Mendilibar y Sampaoli. Fue en la primera etapa del argentino cuando Navas alcanzó esa relevante cifra de 47 partidos, en la campaña 2019-20. Un dato que logrará igualar en el caso de que juegue algún minuto ante el Elche en el partido correspond­iente a la 36ª jornada de LaLiga Santander.

Son para presumir el resto de estadístic­as que unen para siempre a Navas a las más prestigios­as competicio­nes a nivel internacio­nal y nacional, dado que el canterano y mito del sevillismo acumula 470 encuentros de LaLiga Santander, 65 de la Copa del Rey y 64 en la Europa League, que muy probableme­nte tornarán en 65 en esa finalísima ante la Roma del 31 de mayo con la que ya sueña jugar. Igualmente, datan 43 duelos en la Champions, cinco en la Supercopa de España y tres en la Supercopa de Europa. Pese a los obstáculos y la competenci­a, Navas quiere seguir siendo faro y ejemplo de tantos niños que admiran la figura de un deportista extraordin­ario capaz de perdonar.

Regularida­d El campeón del mundo es el quinto futbolista que más minutos reúne de la plantilla sevillista en todas las competicio­nes

Dura entrada Navas aceptó la petición de perdón del bético Miranda tras la contundent­e entrada en el derbi del domingo, que le dejó cicatriz en la pierna

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