La Virgen espera en su nuevo paso a los romeros
rre del Mar y Rincón de la Victoria.
De nuevo, los simpecados estaban protegidos por si pudieran caer gotas de lluvia y la patrona de Málaga, la Virgen de la Victoria, se hallaba en la delantera de la carreta plateada proveniente de la Costa del Sol y que arrancó su camino en la localidad sevillana de Coria del Río tras despedirse el pasado fin de semana de su ciudad.
Otra imagen para el recuerdo es cómo avanzaron los dos simpecados entre un mar de pinos de color verde oscuro y con un cielo plomizo que amenazaba agua pero que, al final, respetó a unos romeros que buscaron el sesteo en Pozo Culebras antes de buscar el próximo hito del camino: la presentación ante la hermandad de Villamanrique y esos siete escalones que llevan hasta la parroquia de Santa María Magdalena del municipio manriqueño.
Entrar en la casa de la Virgen en estos días es entrar en un remanso de paz. Si fuera del templo todo son prisas y preparativos para llevar a las casas todo lo necesario para la romería, en el Santuario todo son rezos y momentos de intimidad junto a la Blanca Paloma. Desde sus andas procesionales, a los pies del retablo, la Virgen del Rocío aguarda como cada año la llegada de los miles de peregrinos que a partir del miércoles convertirán la tranquila aldea en un hervidero.
La Blanca Paloma recibe a todos los rocieros que entran al Santuario vistiendo sus galas de Reina. Luce el traje de las hermandades o ‘de los apóstoles’, una de las prendas más características del ajuar de la Virgen. Diseñado por Joaquín Castilla Romero, fueron las delicadas manos del convento de Santa Isabel de Sevilla las entre los años 1959 y 1961 bordaron en hilos de oro y sedas sobre tisú de plata tanto el manto, como el vestido de la Virgen, obsequio del Vizconde de La Palma, junto a la toca sobremanto y el traje del Niño. Un terno que se completa con cabezas de querubines talladas en marfil por Juan Miguel González y una paloma del Espíritu Santo cincelada en plata por Seco Velasco. Una obra que restauró recientemente, en el año 2021, el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH).
La Blanca Paloma estrena este año la estructura de las andas procesionales fabricada con fibra de carbono y aluminio aeronáutico para evitar roturas como la de 2022
Coronas de 1919
Tanto la Virgen como el Pastorcito Divino lucen las coronas de la Coronación Canónica de 1919 y las ráfagas de punta de martillo cinceladas en plata sobredorada en 1949. El rostrillo de la Virgen es el de Muñoz y Pabón, también estrenado en la Romería de 1919. En cuanto al exorno floral, los tonos elegidos este año, el blanco y el amarillo, hacen alusión al 30º aniversario de la visita de San Juan Pablo II al Rocío. Rosas y gerberas cuyo centro, según informó la Hermandad Matriz, ha sido teñido de negro como mención a los rocieros fallecidos. Sobre todo este terno, un sin fin de joyas, muestras de devoción y gratitud a la Virgen del Rocío.
La Virgen se encuentra sobre sus andas procesionales. Unas andas que han sido renovadas de cara a la próxima romería, a fin de solucionar los problemas detectados el pasado año que motivaron la rotura del banco delantero izquierdo. Un hecho que provocó la suspensión de la procesión del Lunes de Pentecostés. Por ese motivo, se ha realizado una nueva estructura interna totalmente mecanizada, habiéndose eliminado las soldaduras.
Se le han realizado pruebas a la antigua estructura especializada y en base a los resultados se ha realizado
La imagen luce el traje de las hermandades o ‘de los apóstoles’, una de las prendas más características de su ajuar
la nueva, utilizando materiales como la fibra de carbono y el aluminio aeronáutico. El objetivo de todo esto sigue siendo aliviar el peso de las andas e incrementar la seguridad de la Virgen y de los almonteños que la llevan. Estos trabajos se han venido desarrollando desde el pasado mes de julio.
En este sentido, el presidente de la Hermandad Matriz de Almonte, Santiago Padilla, manifestaba a ABC de Sevilla que con estos trabajos «hemos intentado poner remedio a lo sucedido la pasada Romería. Hemos estado trabajando un año para que no se vuelva a repetir y si Dios quiere, este año debemos de disfrutar de una gran procesión, como disfrutamos las primeras tres horas de la Virgen».