Tíempoz zopencos
VIVIMOS COMO SUIZOS
Una religión sin Bernini ni Miguel Ángel está ganando hasta a John Cleese
EL cristianismo ha sido el mayor movimiento civilizador de la historia. Con todo su oscurantismo, Santo Oficio, opresión, curas pederastas y lo que se quiera poner en el debe. Llega ‘La vida de Brian’ en 1979, se ríe de o con Cristo, de o con el cristianismo, y se protesta desde todas sus ramas (John Cleese bromeó con Michael Palin: habían conseguirlo unirlos por primera vez en 2.000 años). 40 después de que Monty Python estrenara la película hay chanzas que no. Hombre. Porque la tolerancia y la intolerancia han cambiado de bando. De banda. John Cleese, guionista y actor de ‘La vida de Brian’, va a eliminar en la adaptación teatral la broma de Loretta porque no es adecuada en el presente y podría ser ofensiva para el colectivo trans. Ya sabemos, Stan (Idle) declara su intención de ser padre gestando a su propio hijo. «Los hombres tienen derecho a ser padres». Pide que «no le opriman» y que le llamen Loretta. «¿Dónde vas a gestar el feto? ¿Lo vas a meter en un baúl?», le preguntan los otros. En fin, que una religión sin Bernini ni Miguel Ángel está ganando. ¿Por qué John Cleese cede? ¿Cree en ello o no se puede permitir ir en contra?
Es lo que toca en tiempos zopencos. Igual que toca no entender ni papa. Miren lo que ha pasado con Miguel Lago en ‘El hormiguero’ sobre lo que Irene Montero dijo de Pilar Lima, su candidata valenciana. Lago estaba criticando a Montero, no riéndose de que Lima sea sorda o bollera. “Dice Irene Montero: ‘ la mejor candidata: sorda, bollera’. Entonces digo, bueno, como ya vale todo, empiezo a faltar. Y aquí este cojo que hemos traído». Házselo entender.
En un episodio de ‘Accused’ (AXN), una madre de alquiler sorda tiene un hijo sordo y los padres contratantes pretenden ponerle un implante coclear. La madre se opone y van a juicio porque la sordera, sostiene, no es un defecto, es una identidad. Y convence a los otros. La tolerancia tiene mucho de superioridad, vale. Pero no es punible frente al deseo de empezar a dar hostias (lo que me sale con esto y con la decisión de John Cleese. ¡De John Cleese!). Ojalá extinguirnos ya.