Monumentos como la Plaza de España que cobran entrada
El proyecto del Ayuntamiento de cobrar una entrada por la visita a la Plaza de España, uno de los monumentos más visitados de la ciudad y de los más fotografiados del mundo, ha suscitado división de opiniones. Las reacciones políticas, procedentes de los partidos a la izquierda del PP, que gobierna la Corporación, han sido las más contrarias a esta iniciativa mientras que las opiniones de los sevillanos, al verse libres de pagar la entrada, como ya sucede con la visita al Alcázar o a las Setas, han estado más divididas. Sea como fuere, han sido muchas las reacciones negativas en las redes sociales, a pesar de que esa tasa «no disuasoria» (se estima que podría estar en torno a los 5 euros) se emplearía en costear la vigilancia de la plaza las 24 horas del día todos los días del año. Los ataques vandálicos que viene sufriendo el monumento justificarían de sobra esa protección.
La idea de poner precio a la visita al monumento no es, en todo caso, algo descabellado si nos fijamos en el conjunto de espacios públicos españoles. Se cobra en muchos de ellos y con unos fines parecidos a los expresados por el Ayuntamiento de Sevilla. Sin ir más lejos, en las Setas, donde la entrada general cuesta 15 euros (gratis para los sevillanos por la compensación que paga el Ayuntamiento a la constructora).
En el Parque Guell de Barcelona, que cuenta con 12 hectáreas con zonas monumentales, zonas verdes y panorámicas de la capital catalana, el precio de la entrada es de 10 euros, aunque hay descuentos para grupos y determinadas franjas de edad. Esa entrada no da acceso a la Casa Museo Gaudí.
El Pueblo Español de Barcelona se promociona como «arquitectura, arte, tradición, artesanía, aire libre, y un espacio único para actividades familiares, conciertos y exposiciones», algo que podría suscribir íntegramente la Plaza de España. Y tiene algo que incluye el proyecto de José Luis Sanz para el monumento de Aníbal González: un centro de artesanía». Ese espacio barcelonés cobra 13,50 euros por una entrada normal y 40 euros a una familia formada por dos adultos y dos niños.
Más cerca, el Conjunto Romano de Mérida incluye teatro y anfiteatro, Alcazaba, Casa del Mitreo, Cripta Arqueológica, Morería, Casa del Anfiteatro, Templo de Diana y Circo Romano. Por cada uno se cobra entrada aunque se puede ver todo por 17 euros.
En Málaga, el Caminito del Rey, gestionado por la Diputación Provincial, hace lo mismo, aunque a un precio algo
El Parque Guell (arriba a la izquierda) cobra 10 euros la visita, algo menos que el Pueblo Español de Barcelona (derecha) (13,50). En Las Setas de Sevilla la entrada es 15 euros. Debajo, el Caminito del Rey (izda.) (10 euros), el Conjunto Romano de Mérida (15) y el Parque de Cabárceno, en Cantabria (25 euros) inferior: 10 euros. Se trata de la visita a un paso construido en las paredes del desfiladero de los Gaitanes, ente los términos municipales de Ardales, Álora y Antequera. La pasarela peatonal consta de más de tres kilómetros, adosada a la roca y colgando hasta 105 metros de altura sobre el río, en unas paredes que llegan a ser verticales.
También de naturaleza es la visita a los Lagos de Covadonga, en la provincia de Asturias, dentro del parque nacional de los Picos de Europa. Antes se podía hacer la visita libremente pero salvo en días especiales se obliga a hacerla en autobús previo pago de 9 euros.
Bastante más cara (25 euros) resulta la visita al Parque de la Naturaleza de Cabárceno, en Cantabria, donde cientos de especies de animales viven en semilibertad. No se trata de un zoológico convencional ni de un parque natural sino de una mezcla de ambos en un paisaje kárstico, sobre una antigua explotación minera a cielo abierto.
En Barcelona se dan varios casos parecidos al que se plantea en Sevilla de cobro de tasas para su conservación pero hay otros muchos ejemplos