El Betis, víctima de la reducción del tiempo de juego real Bartra y Bakambu trabajan en la ciudad deportiva
▸ Ante el Rayo, el equipo verdiblanco vivió el segundo partido en el que menos jugó
llegrini y que llegó a su punto más alto proclamándose campeón de Copa en 2022. El técnico siempre habló de ciclos de tres temporadas y ahora cumple una cuarta mientras la entidad se afana en reconstruir el plantel con nuevos referentes como Isco, Fornals, Marc Roca, Ayoze, Chimy, Chadi Riad o Bakambu para refrescar conceptos y que el discurso del técnico no se vea afectado por la repetición durante tantos años, algo complejo y que sucede en muchos equipos.
El mayor riesgo, en todo caso, reside en que Pellegrini pueda considerar al final de la temporada que su etapa en el Betis ha concluido y que no puede sacarle más rendimiento al equipo. No se espera en estos momentos y no es algo que haya sucedido en su trayectoria, siempre vinculada a los contratos firmados. En Villarreal, Málaga o City cumplió lo acordado y en el Real Madrid y West Ham fue despedido. El técnico renovó su contrato en el verano de 2023 y ese movimiento fue un indicativo no sólo al mercado sino al propio plantel para que los jugadores que estaban más incómodos supieran que la estabilidad pasaba por la continuidad del técnico.
Entonces también se barajaba como riesgo mayor la tentación de un fútbol nuevo como el de Arabia Saudí que podía convencer con millones y proyectos interesantes a Pellegrini en la etapa final de su carrera. La marcha de Ramón Planes fue un segundo aviso de la atención con la que se miraba al Betis desde esas latitudes pero Pellegrini no estaba convencido de ese salto y se manifestó comprometido con el proyecto verdiblanco aunque también ha tenido diferencias propias de las gestiones en este curso como la confección de la lista de la Europa League o su desconfianza previa en un mercado de fichajes de enero del que luego dijo estar plenamente satisfecho. Ahora resta conseguir el objetivo de la histórica cuarta clasificación consecutiva para competiciones continentales. «Tenemos quince días para resetearnos y salir de esta racha de derrotas continuadas. Hemos sido un equipo regular en estos años, hemos estado poco en estas situaciones y hay que buscar la manera de salir lo antes posible», afirmaba el entrenador del Betis.
Si el tiempo de juego real se reduce, el Betis no consigue sacar un buen resultado. Los equipos que saben parar el ritmo a su antojo, y con la permisividad arbitral, tienen un argumento claro cuando se miden a los verdiblancos para tratar de llevarse el triunfo. Y es que en los tres encuentros en los que menos porcentaje de tiempo efectivo han jugado los de Pellegrini los resultados han sido negativos. Uno de ellos fue el Rayo - Betis del pasado domingo, el segundo en este ranking. El primero fue el Betis-Getafe de la jornada 23ª y el tercero, el Celta-Betis de la 19º.
Y es que en ninguno de esos tres encuentros logró el Betis resultados que le beneficiaran. Perdió 2-0 ante el Rayo, empató contra el Getafe 1-1 y cayó en Vigo 1-0. El duelo en Vallecas fue, con diferencia, en el que menos tiempo efectivo se empleó en la jornada 29ª dado que se jugó un 46,4 por ciento del tiempo siendo un choque en el que se descontaron muchos minutos y se llegó, tras decisión de Pulido Santana,
El Real Betis publicó ayer imágenes de Bartra y Bakambu haciendo ejercicios sobre el césped en la ciudad deportiva Luis del Sol aprovechando el día de descanso del resto de la plantilla. El delantero congoleño está en el tramo final de la recuperación de la lesión que sufrió ante el Dinamo en Zagreb, el día que se estrenó como titular y anotó un gol antes de ser sustituido al descanso. Mientras, el defensa espera poder estar con el grupo a primeros de abril después de la larga convalecencia por la operación en el tendón de Aquiles a la que tuvo que someterse en el mes de septiembre. Hoy volverá el equipo bético al trabajo pensando en el Girona.
En los tres encuentros en los que menos tiempo real jugó (ante Getafe, Rayo y Celta) los de Pellegrini no sacaron resultados positivos
hasta el 104:02. Se jugaron 48:17 minutos, a mucha distancia de los 50:34 de los 94:42 del Mallorca - Granada.
Ocurre, además, que la derrota bética en Vallecas está entre los diez partidos que con menor tiempo efectivo se han disputado en LaLiga. Y es que hasta la fecha el Almería - Real Sociedad de la decimotercera jornada tiene la plusmarca con sólo un 39,5 por ciento en juego, seguido del Alavés-Almería de la siguiente jornada (42,3). Getafe, Alavés y Mallorca son también recurrentes en estas clasificaciones. Se da la circunstancia de que en los partidos del Betis se juegan 56 minutos de medio, dos por encima de LaLiga en estas jornadas. Lejos de los 48 minutos del duelo ante el Rayo. El cambio de estilo del equipo madrileño se evidencia con que en la primera vuelta la visita madrileña al Villamarín, con resultado de 1-0 para el Betis, se jugaron un 54,43 por ciento de los minutos.
En los duelos en los que los de Pellegrini han podido tener más ritmo de juego han obtenido normalmente mejores resultados aunque también hubo una goleada en contra. Suele ocurrir ante equipos de mejor trato del balón. El choque del que más tiempo efectivo de juego ha disfrutado el Betis este curso fue la visita del Real Madrid al Villamarín, que finalizó 1-1, con un 67 por ciento con la pelota corriendo. Le sigue el Cádiz-Betis (resultado de 0-2 y 61,8%), Barcelona - Betis (5-0 y 61,7%), el Real Sociedad-Real Betis (0-0 y 61,1) y el Betis-Las Palmas (1-0 y 61).
En definitiva, que cuando el Betis vive un partido en el que hay poco tiempo real en juego sufre mucho más que cuando el ritmo es más alto. Un dato que conocen los rivales y que ha de saber evitar como elemento vulnerable el equipo de Pellegrini en este tramo final de la temporada.