La moda del ‘chemsex’ agrava la incidencia de las ITS entre los jóvenes
▸ El uso sexualizado de drogas se está dando en pisos particulares y en macrofiestas
El aumento de las ITS en Sevilla capital se debe a varias causas, la principal, el cambio del patrón de comportamiento sexual y la pérdida del miedo al sida y a otras enfermedades. Y muestra de ello es la moda de las fiestas ‘chemsex’, que hacen furor entre los jóvenes. Una de ellas, celebrada hace varios fines de semana en una discoteca de Santa Clara, acabó con la intervención de la Policía, que se encontró a medio centenar de personas semidesnudas que habían consumido distintos tipos de drogas.
Fuentes del DSAP destacan que «se está haciendo muy popular, especialmente entre franjas muy jóvenes de población, el uso de determinadas sustancias con la intención de tener un sexo más satisfactorio o duradero. Se trata de vasodilatadores (para aumentar el placer) o estimulantes como anfetaminas o la viagra que permiten prolongarlo. También se utiliza la efedrona, las metanfetaminas, la cocaína, el ‘speed’ y otras drogas ilegales. Todo esto está favoreciendo las ITS porque está asociado a prácticas de riego y sexo sin medidas de protección». Se da también en macrofiestas que preocupan mucho a los responsables sanitarios por la participación creciente de población adolescente.
Otro dato analizado en un informe del DSAP es la incidencia del llamado ‘chemsex’ (uso sexualizado de drogas químicas) en el crecimiento de las infecciones de transmisión sexual. «Nuestro sistema de vigilancia incluye una entrevista telefónica con cada caso declarado en un centro de salud para identificar sus contactos. Es una de las medidas de control para evitar la propagación de la enfermedad, a la que se une la de la detección precoz y el tratamiento precoz», explican fuentes del DSAP. Estas entrevistas se hacen bajo un riguroso control que garantiza la confidencialidad de las respuestas. «Nuestro personal está especialmente entrenado para este tipo de entrevistas motivacionales que respetan completamente la intimidad de todas las personas, a las que se pide colaboración para hacerse las pruebas y evitar la propagación de ITS», añaden estas fuentes.
Este servicio es heredero del que se puso en marcha con motivo de la pandemia en 2020 y que se denominó «rastreadores Covid». «Ahora está más enfocado a la educación y al control de las infecciones de transmisión sexual. Tratar preventivamente a esos contactos de los infectados para evitar que la enfermedad se propague y progrese». Los tratamientos contra las ITS son, en general, muy efectivos, y logran cortar la enfermedad de forma radical, si no se trata en estadios demasiado avanzados. En 2023 se analizaron 980 casos en Sevilla capital, de los que se identificaron 887 contactos, en los cuales se detectaron 47 casos secundarios. En 225 casos se pudo hacer las pruebas y el tratamiento completo.
El servicio de vigilancia de las ITS es heredero de los famosos «rastreadores Covid» que se pusieron en marcha en 2020