El fin de la recogida neumática y una alternativa para el Centro
▸ El distrito Norte tendrá el mismo sistema que el resto de la ciudad a pesar del rechazo de algunos de los vecinos
Lipasam afronta a corto plazo dos retos de importancia en otros tantos distritos de la ciudad. Por un lado, la empresa ha tomado la decisión de acabar definitivamente con el sistema de recogida neumática en el distrito Norte, implantando hace ya algunos años en las calles de Pino Montano y en sus barriadas aledañas, argumentado para ello la poca efectividad de este sistema y el elevado coste que supone para las arcas municipales, además del importante número de efectivos que debe utilizar para solucionar los desbordes que se producen con demasiada frecuencia. Pero no es este el único frente que continúa abierto, pues sigue en estudio la solución definitiva que se adoptará en el caso concreto de las calles del Casco Antiguo, que por su estrechez y complejidad dificultan el acceso con normalidad de los vehículos de recogida de carga lateral.
En el caso de la recogida neumática del distrito Norte, el Ayuntamiento de Sevilla aduce que existe un descontento vecinal con este sistema. Se basan para ello en las más de mil incidencias que se han producido desde el mes de enero de 2022 hasta la actualidad, la mayoría de ellas centradas en los buzones llenos y sin vaciar y en los periodos de mantenimiento en los que los contenedores están fuera de servicio. A todo ello se suman también las quejas por la suciedad o por los residuos que se acumulan en el entorno de este sistema, sin que los vecinos aprecien una mejora real de la limpieza en sus calles. Sin embargo, no todos han sido reproches, pues desde que se dio a conocer la intención del gobierno ha habido entidades vecinales que han mostrado su contrariedad ante esta decisión, contando en su reivindicación con el apoyo de los grupos políticos de la oposición.
A pesar de estas protestas, y de que incluso en el último Pleno municipal se aprobó una moción presentada por el PSOE para poner freno a la supresión de la recogida neumática en estas barriadas, el comité ejecutivo de Lipasam ha decidido continuar con este proceso. Así se aprobó en la reunión que se celebró esta misma semana, con un resultado de ocho votos a favor y cinco en contra. Entre las mejoras planteadas por el gobierno municipal en las que se justifica este cambio se encuentran el ahorro de los costes anuales, que pasarán de los actuales 2,7 millones a los 850.000 euros, o la posibilidad de destinar parte de la plantilla que a día de hoy se dedica a resolver las deficiencias de este sistema a otras necesidades de la ciudad. De este modo, la recogida neumática será sustituida por contenedores de carga lateral, los mismos ya implantados en el resto de la ciudad.
En concreto, y según la información facilitada por el Ayuntamiento, los barrios a los que afectará esta remodelación del sistema son Pino Montano, Consolación, Los Carteros, Villegas, Los Príncipes-La Fontanilla, San Diego, Pino Flores, Santa Justa Rufina y Parque de Miraflores. En todos ellos se realizará una inversión de 1,5 millones de euros para la implantación de 750 nuevos contenedores de los diferentes tipos de residuos, tanto de vidrio como de papel y cartón y residuos orgánicos, además de contar con dos camiones de recogida adicionales.
Lo que por ahora sigue en el aire es la decisión definitiva que se tomará en el caso de las calles del Casco Antiguo. Hasta ahora, esta zona de la ciudad contaba mayoritariamente con contenedores individuales que se entregaban a las comunidades de vecinos para su autogestión. Es decir, eran los residentes los encargados de tirar en ellos sus bolsas de basura, sacarlos a la puerta de sus edificios a una hora concreta y, una vez que pasaba el camión de Lipasam, volverlos a introducir en las zonas comunes de su hogar. La empresa asegura que está estudiando cuál es la mejor alternativa para resolver los inconvenientes generados por el actual sistema, sin descartar aplicar la misma fórmula que se instalará en el distrito Norte.
Lipasam estudia cuál es la mejor alternativa a los contenedores individuales que actualmente hay en las viviendas del Casco Antiguo