Los universitarios exigen pruebas presenciales sin riesgos

Covid-19

Los universitarios están muy preocupados por el aumento de los contagios de covid-19 en Castilla-La Mancha, donde se registra uno de los índices de casos por 100.000 habitantes «más alarmantes» de España. Y exigen medidas en los exámenes presenciales, que se reanudarán mañana en todos los campus y sedes, menos en Toledo debido al temporal Filomena.

Así lo ponen de manifiesto en un escrito firmado por dirigentes del Consejo de Representantes de Estudiantes de la universidad. Su presidente, Óscar Sánchez, y su secretaria, Natalia Martín, lo enviaron ayer al Consejo de Dirección de la Universidad de Castilla-La Mancha, al presidente de la comunidad, Emiliano García-Page, y a su consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez.

En la misiva exponen que se ha comprobado la «eficacia» del plan de contingencia durante las clases, pero «se han detectado diversas carencias» en el control y la gestión de espacios en los exámenes y pruebas de evaluación presenciales. Son, a su juicio, unos «factores que suponen un riesgo para la salud» de los universitarios.

En la región estudian unos 30.000 alumnos. Con este elevado número, el consejo de estudiantes pide crear «medidas adicionales para futuros procesos de evaluación» que busquen evitar cualquier aglomeración y que sean «complementarias a los protocolos ya existentes».

Además, solicita ejecutar un plan de contingencia «específico» que esté adaptado a la evaluación presencial. Para eso, el consejo sugiere que el acceso de acceso del alumnado a los lugares donde se examinarán sea regulado «mediante el llamamiento escalonado u otras medidas», siempre con el fin de evitar las aglomeraciones en las zonas comunes de los edificios.

Los universitarios también instan a poner en su conocimiento «con la suficiente antelación» los protocolos específicos en las pruebas evaluables. «Consideramos indispensable un ambiente de seguridad sanitaria y bienestar óptimos para la realización de las pruebas», reclaman.

Por último, piden al gobierno regional que requiera a la universidad la realización de la evaluación y docente digital «en beneficio y seguridad de toda la comunidad universitaria, al menos mientras no se produzcan mejoras en la situación epidemiológica». Y ponen un límite. Entienden «como perjudicial y de riesgo» si hay más de 500 casos acumulados por cada 100.000 habitantes en 14 días.